Madrid se queda sin uno de sus templos musicales. Las salas de conciertos de media capacidad abundan cada vez menos en la capital. Divino Aqualung (paseo de la Ermita del Santo, 48, Latina) comunicó ayer oficialmente que cierra el sábado. El último concierto será ese día: tocarán los ingleses The Magic Numbers. Mañana, en la penúltima actuación, estará en el escenario Amparanoia. Los dueños del centro comercial donde está la sala quieren reformar el 70% de la superficie y no se plantean ningún espacio para una nueva discoteca.
Divino Aqualung empezó a programar conciertos en 1993. Por la sala han pasado músicos de todos los palos: Keith Richards, Iggy Pop, The White Stripes y Massive Attack... Los promotores calculan una media de 1.500 espectadores por actuación. El cierre deja sin trabajo hasta a 50 empleados.
Una ciudad sin salas
«Madrid es la capital europea con menos salas de medio aforo», dijo ayer Ramón del Precinto, programador de Divino Aqualung. De este tipo de recintos (entre 2.000 y 10.000 personas), donde se celebra el 70% de los conciertos de rock, en Madrid sólo quedan tres: Macumba, La Riviera y, hasta el sábado, el Aqualung.
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