Clemente percibe un "ligero repunte" en 2010 en adquisición de maquinaria agrícola lo que desvela una leve recuperación

La consejera abre Agraria 2011, donde destaca que la innovación mejora el rendimiento de las explotaciones y dota de competitividad al sector
Inauguración de la Feria Agraria 2011
Inauguración de la Feria Agraria 2011
EP
Inauguración de la Feria Agraria 2011

La consejera de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León, Silvia Clemente, ha percibido un "ligero repunte" en 2010 en la adquisición de maquinaria agrícola lo que es una "buena noticia" porque desvela una leve recuperación en el sector tras los datos registrados en 2009, un año en el que la inversión en nuevos equipos fue prácticamente nula, aunque, como ha señalado, no se llega al nivel de 2008.

En concreto, el pasado año los agricultores de Castilla y León destinaron 133 millones de euros a la adquisición de maquinaria, lo que supone un incremento con respecto a 2009 y desvela un "síntoma de esperanza" en el sector agrario, algo que no se extiende al ganadero dado el incremento del precio de los cereales.

Clemente ha pronunciado estas palabras en el acto de inauguración de la segunda edición de la feria bienal Agraria 2011 en la que participan 235 empresas que muestran las novedades en maquinaria agrícola y a través de la que se permite comprobar "lo que supone la innovación tecnológica" para el campo.

Para la consejería de Agricultura y Ganadería la modernización del campo es uno de los objetivos principales, ya que la finalidad es ganar competitividad y mejorar el rendimiento de las explotaciones, lo que se consigue mediante la aplicación de la tecnología y la biotecnología.

En este punto Silvia Clemente recordó que entre 2007 y 2010 la Junta ha destinado 104 millones de euros para modernizar el sector agrario a través de la compra de maquinaria, lo que supuso la financiación del 50 por ciento del gasto total invertido por los agricultores y que en este mismo periodo ascendió a 214 millones de euros.

Más productividad

Según los datos aportados por la Consejería de Agricultura el índice de mecanización del campo se ha duplicado en los últimos 20 años y la productividad vegetal se ha incrementado mediante la tecnología, ya que, en tubérculos como la remolacha se ha pasado de una producción de 45 toneladas por hectárea a 90 en los últimos 20 años, algo que ha ocurrido también con la productividad animal, donde el rendimiento medio de leche de vaca ha pasado de 3.500 litros por animal a 7.000 litros en los últimos 20 años.

La importancia de invertir en tecnología para mejorar el rendimiento radica en que Castilla y León es la primera comunidad autónoma en superficie de los principales cultivos herbáceos en extensivo, tales como cereales de invierto con 1,9 millones de hectáreas, en maíz con 95.986, en remolacha con 32.000 hectáreas y en patata con 20.658 hectáreas.

La relevancia de estos datos se plasman en el censo de maquinaria agrícola, ya que la Comunidad posee el 14 por ciento —150.000 unidades— de los tractores inscritos en el ámbito nacional, el 26 por ciento de las cosechadoras de cereales —14.000 unidades— y el 62 por ciento de las cosechadoras de remolacha.

En cuanto a la adquisición de maquinaria nueva en 2010 la Región adquirió 1.291 tractores y 112 cosechadoras de cereales. En total se adquirieron casi 5.000 equipos de maquinaria nueva con una inversión de 133 millones de euros.

La feria

Clemente ha abierto hoy la Feria Agraria 2011 en la que participan 235 empresas para mostrar las novedades en maquinaria agraria hasta el próximo sábado 12 de febrero. La oferta expositiva presentada por fabricantes, importadores y distribuidores se ha incrementado con respecto al certamen de 2009, al igual que la superficie ocupada.

En total se ha incorporado más de una treintena de nuevos expositores, lo que ha posibilitado ampliar la gama de productos y servicios, así se incluyen desde tractores, cosechadoras y sembradoras a equipos de preparación de suelos, protección de cultivo o software para explotaciones agrícolas.

Entre las empresas participantes figuran tanto pequeños fabricantes de aperos como grandes empresas exportadoras de maquinaria y multinacionales que muestran diversidad de equipos adaptados a cultivos de toda índole, desde remolacha azucarera, patata, viñedo, cereales, frutícola e incluso arroz.

Los participantes proceden de Castilla y León, Cataluña, Castilla-La Mancha, Galicia, Madrid, Navarra, Aragón, Francia o República Checa, entre otras, y las máquinas proceden de países como Bélgica, Holanda, Italia, Estados Unidos, Japón, Austria, Irlanda, Portugal, China, Alemania, Dinamarca, Polonia o Brasil.

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