El portavoz de Educación del Grupo Parlamentario Popular, Román Rodríguez, ha defendido este martes una proposición no de ley en la que demanda a la Xunta que establezca "las medidas precisas para hacer efectiva una mayor implicación de las familias" en el ámbito educativo a través de procedimientos "de consulta y de participación directa" en la adopción de decisiones.

Esta propuesta, en línea con el anteproyecto de Ley de convivencia y participación escolar presentada por el conselleiro del ramo, Jesús Vázquez Abad, a principios del pasado mes de enero, le ha valido las críticas de los portavoces de la oposición. Así, ante el pleno de la Cámara y en presencia del titular de Educación, socialistas y nacionalistas acusaron a los populares de "burlarse del Parlamento".

Además, tanto Guillermo Meijón (PSOE) como Carme Adán (BNG) recriminaron a Vázquez Abad que, para él, "participar es estar de acuerdo con las propuestas del Gobierno", dado que el rechazo del Consello Escolar de Galicia al citado borrador de anteproyecto por "una mayoría abrumadora" no fue tenido en cuenta.

"Es el máximo órgano de participación de la comunidad educativa", recordó la nacionalista, para reprochar al conselleiro sus críticas a la supuesta "manipulación" de sus miembros —sindicatos, profesores, alumnos, organizaciones juveniles, agrupaciones de docentes, representantes de la Administración autonómica y local— mientras que el socialista advirtió de que el proyecto "ya está deslegitimado".

Opinión "libre"

"Se debe favorecer que las familias opinen de modo libre, como en experiencias recientes", argumentó Rodríguez, en alusión a la consulta sobre el gallego, para incidir en que "voces autorizadas" señalan que la implicación familiar contribuye a "mejorar el éxito escolar y a reducir la conflictividad". Como prueba de que "el clima en las aulas no siempre es el deseable", esgrimió un informe de UGT que revela que los profesores dedican "un 40% del tiempo a intentar poner orden".

Así, tras justificar que la Xunta no atienda al Consello Escolar en que "la responsabilidad de legislar" no es de este órgano, el diputado ha pedido el apoyo de los grupos para reformar el modelo educativo vigente, que es "fundamentalmente socialista" y sitúa a España como "el segundo país" de la Unión Europea con más fracaso escolar.

Convencido de que la oposición se niega a apoyar su propuesta —que será votada en la segunda jornada de la sesión plenaria— por "miedo" a que las familias le digan "lo que no quieren oír", ha criticado su forma de hacer política de "todo para el pueblo, pero sin el pueblo". "Nosotros queremos escuchar a los padres de modo directo y ustedes no quieren que opinen", ha sentenciado el popular. "DIMISIÓN"

Frente a esto, la parlamentaria nacionalista ha criticado el borrador de anteproyecto de ley que da respuesta a la petición del PP en la Cámara como una norma para "reducir el ámbito de aplicación del gallego". "Pretenden utilizar a las familias para legitimar su lucha contra el gallego", ha acusado, al tiempo que ha criticado su contenido "reaccionario" y su lenguaje "sexista".

"Si quiere participación, comencemos de cero", ha planteado, y con ella ha coincidido Guillermo Meijón, para quien el conselleiro debería "dimitir si no está dispuesto a escuchar y a propiciar un debate con la comunidad escolar".

De hecho, a su entender, el documento normativo es "únicamente punitivo, poco efectivo, trata a los docentes como policías y a los alumnos como delincuentes, no incluye ningún compromiso para la administración y es una estafa a la sociedad", dado que no cumple lo previsto en el programa electoral del PP.