La Guardia Civil ha detenido a los secuestradores de una mujer de Alhendín (Granada) a la que intentaron matar arrojándola por un barranco el pasado mes de octubre, y ha desmantelado por completo una banda organizada que se dedicaba en las provincias de Granada y Alicante a asaltar viviendas con moradores, a los que retenían y robaban.

En esta operación la Guardia Civil ha detenido a once personas, entre ellas cinco hombres de nacionalidad dominicana, acusadas hasta el momento de un delito de robo con violencia, de dos delitos de detención ilegal y de un delito de homicidio en grado de tentativa.

Los detenidos son los responsables del homicidio en grado de tentativa de una mujer durante la noche del pasado 12 de octubre de 2010 en la localidad granadina de Churriana de la Vega. Esta mujer, que había sido secuestrada junto con su hijo, apareció malherida en un barranco del término municipal de La Malahá, a unos cuarenta metros de profundidad, a la altura del kilómetro 9,500 de la carretera A-338.

La víctima y su hijo habían sido secuestrados junto a una gasolinera de Churriana de la Vega, donde habían acudido atendiendo a una llamada telefónica para la venta de un coche que allí tenían expuesto.

En el secuestro de estas dos personas participaron tres hombres que los obligaron con un arma a montarse en su propio coche y dirigirse hasta las afueras del vecino pueblo de Las Gabias, en donde los esperaban otros integrantes de la banda.

Una vez allí, siempre bajo la amenaza de una pistola, los detenidos obligaron a sus víctimas a que les diesen las llaves de su domicilio y la combinación de las dos cajas fuertes que sabían que tenían en la casa.

Los detenidos consiguieron abrir una de las cajas fuertes y apoderarse del dinero que había en ella, de dos teléfonos móviles y de un ordenador portátil.

La dieron por muerta

A pesar del botín, los detenidos volvieron al lugar, donde aún se encontraban las dos víctimas, para intentar sonsacarles la combinación de la otra caja fuerte y al no conseguirla despeñaron a la mujer. Cuando la dieron por muerta soltaron al hijo y abandonaron el lugar.

Fue él quien solicitó ayuda inmediatamente y la Guardia Civil rescató a la madre y se hizo cargo de investigar los hechos.

La poca información con la que contaban los guardias civiles del equipo de atracos de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Granada, era el color y el modelo del vehículo utilizado por los secuestradores, y que algunos de éstos eran personas de raza negra.

La Guardia Civil localizó este vehículo en la localidad granadina de Huétor Vega, y averiguó que pertenecía a una mujer relacionada sentimentalmente con un hombre de nacionalidad dominicana. También se han averiguado que este último se relaciona con otros compatriotas sospechosos de hechos similares en Granada y Alicante.

Otro secuestro

Las detenciones se precipitaron de forma inesperada el pasado día 26 de enero cuando uno de los ahora detenidos por su participación en los hechos, pasó de secuestrador a víctima, ya que fue secuestrado por el resto de la banda en Huércal Overa (Almería), con la intención de exigir a su madre setenta mil euros por el rescate de su hijo y así saldar una deuda de droga.

Este último secuestrado fue abordado por cinco individuos en la A-92, en el término municipal de Huércal Overa, y lo trasladaron, primeramente a un domicilio de Albolote, un pueblo del cinturón metropolitano granadino, y posteriormente hasta un piso en la capital granadina.

Al día siguiente, en el traslado del secuestrado desde Albolote hasta Granada, éste consiguió escapar de sus captores y se refugió en una farmacia granadina. Varios ciudadanos alertaron al 091 y una patrulla de Seguridad Ciudadana intervino en lo que parecía una pelea, comprobando después que se trataba de un secuestro.

La Guardia Civil supo de la actuación policial y se hizo cargo de las diligencias y de continuar con la investigación.

Tras las tres primeras detenciones, la Guardia Civil ha realizado cinco registros, cuatro en domicilios de Granada, Huétor Vega y Alhendín, y un registro en el trastero de un bar de Albolote, en el que estuvo el secuestrado antes de ser trasladado hasta el barrio de El Zaidín de Granada. Igualmente han detenidas otras ocho personas más relacionadas con ambos secuestros.

Los detenidos han sido puestos a disposición judicial y ocho de ellos han ingresado en prisión, aunque la investigación continúa abierta ante la posible implicación de los detenidos en otros hechos similares en las provincias de Granada y Alicante.