El ministro de Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, ha visitado la Ampliación de la Capacidad de Destilados Medios (ACPDM) de la refinería La Rábida de Cepsa en Huelva y ha destacado que dichas instalaciones, que supusieron una inversión de 1.000 millones de euros y fueron inauguradas por el Rey Juan Carlos I el pasado mes de octubre, permitirán reducir déficit de gasóleo importado por el aumento de su producción, ya que España es "muy deficitaria".

En declaraciones a los periodistas en Huelva, Sebastián ha destacado la sensibilidad en materia medioambiental que tienen las nuevas instalaciones, las cuales, según ha manifestado, muestran que el sector energético "no es un enemigo del medio ambiente, sino que puede ser un aliado, y todo lo que sea trabajar en esta dirección es muy bueno".

El ministro, que ha estado acompañado por el presidente de Cepsa, Santiago Bergareche; el consejero delegado, Dominique de Riberolles, y otros altos directivos de la compañía, ha señalado durante su visita que la inversión realizada por Cepsa en la ampliación de La Rábida tendrá un efecto positivo en la actividad industrial y económica de Andalucía, así como en la creación de empleo directo e indirecto de calidad.

El titular de Industria ha destacado también el componente innovador de la ampliación de la planta, en la que se ha implantado una tecnología que permitirá un mayor aprovechamiento del petróleo y un mayor rendimiento de la refinería, y la mejora que supone para el abastecimiento energético del país el incremento de la capacidad de producción de gasóleo, producto en el que España es deficitaria.

El presidente de Cepsa, Santiago Bergareche, ha destacado durante la visita que la industria ha sido y es "el motor de las grandes economías mundiales por su impacto directo y por su aportación al producto interior de la economía", por lo que Cepsa trabaja para cumplir sus objetivos empresariales y convertirse en una fuente de desarrollo para la sociedad en la que opera.

Adicionalmente, ha comentado Bergareche, el proyecto ACPDM, impulsado por la necesidad de aumentar la necesidad del suministro en España, permite convertir a esta instalación en una plataforma de refino de primer nivel, mejorando su eficiencia energética, su nivel de competitividad global y maximizando su sinergia con las otras dos refinerías, ubicadas en San Roque y Tenerife.

Asimismo, el consejero delegado de Cepsa, Dominique de Riberolles, ha matizado que la evolución negativa del entorno económico en los países de la OCDE y en España en particular, así como las políticas de eficiencia energéticas, han reducido de forma significativa la demanda de productos de automoción y aviación, lo que se traduce en una cierta disminución de la dependencia de las importaciones, a lo que ha añadido que "las difíciles condiciones actuales están poniendo a prueba la competitividad de las refinerías europeas, haciendo patente lo acertado de nuestra reciente e importante inversión en Huelva con ACPDM, así como la política de innovación constante de Cepsa". 1.000

Millones de euros

Con una inversión en torno a 1.000 millones de euros y una complejidad equivalente a duplicar la producción de la refinería existente, incorpora unidades de proceso inéditas en el esquema de fabricación de Cepsa. En esta obra han trabajado cerca de diez ingenierías, 200 proveedores de bienes de equipo y más de 320 empresas contratistas, aportando directamente un millón de horas de ingeniería, cerca de siete millones de horas de montaje y supervisión en la refinería, con la colaboración de hasta 3.500 personas en los meses picos de actividad.

Según la empresa, la puesta en servicio del proyecto ha significado la creación y cobertura en Cepsa de 166 empleos directos estables de alta cualificación y otro número significativo de indirectos. Además de un incremento importante de los servicios externos requeridos y de la actividad económica inducida en el entorno de la refinería.

Con la ampliación realizada, la producción de la refinería asciende a más de nueve millones de toneladas, de las cuales más de cinco corresponden a destilados medios —gasóleo y queroseno—, productos deficitarios en España de los que se importan más de 11 millones de toneladas anuales.

A nivel medioambiental, el proyecto constituye evidentemente una modificación sustancial de la refinería La Rábida que ha renovado recientemente la Autorización Ambiental Integrada (AAI) a través de un proceso de evaluación, liderado por el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, en el que han sido relevantes las aportaciones del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, así como de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía.

Además, en esta visita se ha aprovechado para informar a las autoridades las características de la nueva planta eléctrica y de vapor, 'Cogeneración 2', puesta en marcha el pasado mes de noviembre. La nueva planta genera 51 megavatios/año de energía eléctrica y 140 toneladas/hora de vapor.