La Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural ha modificado el decreto de ayudas agroambientales, destinadas a la utilización de métodos de producción compatibles con la protección y conservación del medio ambiente, para dar cabida a una nueva línea destinada a la gestión sostenible de la dehesa.

En total, durante este año 2011, la Consejería de Agricultura y Desarrollo Rural destinará 18.505.244 euros para atender nuevos compromisos agroambientales, es decir, que esta cuantía irá para nuevos beneficiaros, al margen de los que ya están recibiendo la ayuda por los compromisos adquiridos en convocatorias anteriores.

El Consejo de Gobierno ha aprobado la modificación de dicho decreto, que además de la nueva línea incrementa notablemente la cuantía de apoyo a la ganadería ecológica, hasta llegar a los 2,6 millones de euros, con el fin de cubrir al máximo de productores.

En el mismo sentido, también experimenta una importante subida la ayuda agroambiental de la apicultura que con, 2.850.000 euros, permitirá que los apicultores extremeños que este año finalizaban sus compromisos de cinco años que se exige para recibir la ayuda agroambiental, puedan seguir recibiendo este apoyo, según ha informado la Junta en nota de prensa.

La nueva línea para gestión sostenible de la dehesa responde al compromiso del Gobierno extremeño de garantizar el futuro sostenible de este singular ecosistema que en nuestra región ocupa 1,4 millones de hectáreas, conjugando la explotación sostenible con la conservación medioambiental.

En la actualidad, en la dehesa extremeña se desarrolla de forma integrada la agricultura, la ganadería extensiva, la silvicultura, la apicultura, así como actividades como la caza o el agroturismo.

Por ello se va poner en marcha esta línea de ayudas, que contará este año con 4.328.244 euros, cuyos fines primordiales serán conservar la dehesa como un sistema productivo de gestión sostenible, asegurar la regeneración del arbolado, fomentar la biodiversidad asociada a este ecosistema y mejorar los parámetros productivos y ambientales a través de la mejora del estado del arbolado.

Para lograr estos fines, los beneficiarios de estas ayudas deberán, durante cinco años, acotar la superficie de dehesa acogida a la ayuda agroambiental, que podrá llegar hasta las 50 hectáreas como máximo, impidiendo en ella la siembra de cultivo alguno. Además, entre otros compromisos, el beneficiario de la ayuda deberá incrementar el arbolado en al menos 25 pies por hectárea en la superficie comprometida.

Junto a esta nueva línea dedicada a la dehesa, se mantienen las ayudas agroambientales a la producción integrada en el cultivo del arroz, frutales de hueso, frutales de pepita, olivar y tabaco y a la producción ecológica de olivar, frutales de secano y viñedo para vinificación.

Asimismo, contempla las líneas para la apicultura, la ganadería ecológica, las razas autóctonas en peligro de extinción y las ayudas para los sistemas agrarios de especial interés para la protección de las aves esteparias.

Para acceder a las ayudas agroambientales, los titulares de explotaciones agrarias tienen que suscribir de forma voluntaria unos compromisos agroambientales durante cinco años consecutivos, salvo para el caso de la línea de producción integrada del tabaco que será de seis años consecutivos.