El consejero de Cultura, Paulino Plata, ha presentado esta tarde la intervención de recuperación de las ruinas de la antigua iglesia de Santa María en Cazorla (Jaén) tras una restauración integral, en la que se han invertido un total de 3.212.217 euros.

Gracia a esta intervención, según ha destacado, se ha hecho posible no sólo la consolidación de estas ruinas sino también poder disponer en la localidad de un espacio emblemático para la realización de actividades culturales al aire libre. Con esta actuación, además, se ha dotado a este enclave de las instalaciones básicas necesarias para mejorar la visita a dichas ruinas, tal y como ha informado el Gobierno andaluz.

"De esta forma, combinamos la conservación y el contacto directo de la ciudadanía con el patrimonio histórico, siempre respetando equilibrios básicos de protección", ha subrayado Plata, para quien con actuaciones como ésta la Consejería que dirige pretende acercar la sociedad a su patrimonio "para que lo conozca y lo sienta como lo que es, algo que nos pertenece a todos".

La actuación, que se ha venido desarrollando en los últimos tres años, ha consistido fundamentalmente en la consolidación de las estructuras, para lo que se ha procedido a la restauración de los materiales pétreos y de los sistemas de cobertura donde se mantiene algún dispositivo de cierre, así como a la formación de un pavimento sin resaltes que establezca la continuidad en todo el plano base de las ruinas.

Asimismo, y pensando en las visitas, se ha mejorado la accesibilidad, se ha habilitado una sala de recepción de visitantes así como la salas laterales de la cabecera y se ha abierto una terraza mirador, desde la cual los usuarios podrán disfrutar de una de las panorámicas más interesantes de la ciudad, dada la ubicación.

De los restos conservados de la iglesia de Santa María de Cazorla tienen especial interés las dos portadas principales: la de la fachada norte y la portada oeste. La primera de ellas sobresale por el frontispicio y hornacina sobre la torre, rematado por dos altorrelieves representando a dos alegorías, la justicia y la fortaleza. De la oeste, de fina traza y líneas clásicas, con arco de medio punto y orden compuesto, destacan los altorrelieves de dos figuras delimitando las enjutas del arco y rematado con una cornisa.