El expresidente catalán Jordi Pujol contempló el martes, por primera vez de manera abierta, la independencia de Cataluña como una posible "alternativa" ante "la marginación y el ahogo" al que se quiere someter a los catalanes en la España actual, y dijo no ver argumentos para oponerse a un Estado propio dado que es algo "viable".

Pujol, que hasta ahora siempre se había mostrado extremadamente comedido a la hora de hablar de la opción independentista, fue más explícito que nunca en un texto publicado en el boletín electrónico del Centro de Estudios Jordi Pujol, titulado Del Tribunal Constitucional a la independencia. Pasando por el Quebec.

"Durante muchos años el nacionalismo catalán mayoritario no ha sido independentista. Ha jugado la carta de un autonomismo que garantizase políticamente y administrativamente un techo alto, económicamente viable y con garantía identitaria", recordó.

Este nacionalismo mayoritario, encarnado por la CiU que él mismo lideró durante más de dos décadas, "rechazaba los requerimientos que algunos sectores le hacían para que se adhiriese al independentismo. Tenía argumentos para hacerlo. Ahora ya no los tiene", añadió.

Tras subrayar que económicamente "una Cataluña independiente es viable", Pujol admitió que aún se podría objetar que no hay que "poner en peligro la cohesión interna catalana" con planteamientos independentistas, un argumento que a menudo utiliza Artur Mas para enfriar las expectativas de un referéndum de autodeterminación.

"Pero incluso este (argumento) pierde peso a medida que se acentúa tanto el trato económico discriminatorio, con repercusiones sociales y humanas. Ahora no tiene argumentos políticos y cada vez menos argumentos sentimentales. O económicos", agregó.

Aunque reconoció que la "opción independentista es de difícil realización", Pujol advirtió de que la otra alternativa es la que "impone" España y que "equivale a rendirse" y a "aceptar la marginación y el ahogo de Cataluña".

"Mientras esperamos el día de un hipotético referéndum oficial y vinculante, los catalanes un objetivo claro sí que tenemos: reforzarnos internamente", concluyó.