«La sentencia quiere que se derribe una parte y lo vamos a demoler entero». De esta guisa recibió ayer el concejal de Grandes Proyectos, Alfonso Grau, la noticia de que el Supremo ha ratificado la sentencia del Tribunal Superior de Justicia que obliga a demoler la ampliación ilegal del campo de Mestalla, que se hizo con el beneplácito del Ayuntamiento. Sin embargo, este campo no se derribará hasta que esté construido el nuevo en Cortes Valencianas (en 2009) y los vecinos de la zona podrían pedir la ejecución inmediata de la sentencia. «Dicha ejecución no es de hoy para mañana», sentenció Grau, en referencia a que ésta se puede demorar años.