El Supremo confirma la condena de 15 años de prisión para el asesino de la asturiana Beatriz Ordóñez

La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha desestimado el recurso interpuesto contra la sentencia emitida en julio por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Granada, que absolvía al asturiano José Miguel Hernández García de los delitos de asesinato y agresión sexual y lo condenaba por uno de homicidio a la pena de quince años de prisión.

La Sala de lo Penal del Tribunal Supremo ha desestimado el recurso interpuesto contra la sentencia emitida en julio por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Granada, que absolvía al asturiano José Miguel Hernández García de los delitos de asesinato y agresión sexual y lo condenaba por uno de homicidio a la pena de quince años de prisión.

La confirmación de la sentencia del tribunal granadino supone que el acusado, José Miguel H.G., deberá indemnizar a Victorino Ordóñez Alonso y Adelaida Ordóñez Sahelices, padre y hermana de la fallecida, y únicos familiares directos de la misma, en la suma de cien mil y ochenta mil euros, respectivamente.

En el auto, el recurrente alegó que no había practicado en su contra prueba de cargo suficiente e insistía en que la víctima se suicidó. El Alto Tribunal ha fallado sin embargo que el acusado es "responsable de los hechos por los que ha sido condenado".

Entre otros aspectos, recuerda que no negó que el día de los hechos se desplazara con la víctima a un paraje apartado de la localidad granadina de Motril y asegura que la versión de que ella se golpeó la cabeza contra el suelo durante un forcejeo es "difícilmente aceptable".

Además, subraya que el perfil genético del acusado apareció en dos manchas de sangre del pantalón de la víctima y llama la atención sobre los arañazos que presentaba el acusado en el brazo derecho. Asimismo, en el vehículo que conducía el recurrente apareció una cartera con el DNI, la tarjeta sanitaria y dos tarjetas de crédito de la víctima.

Por último, los ponentes del Supremo consideran "absolutamente inexplicable" que si Beatriz se suicidó después del forcejeo, éste no llamase a los servicios de emergencia.

Los hechos

En la resolución de la Sección Segunda de la Audiencia, a la que tuvo acceso Europa Press, los magistrados consideran probado que en la tarde-noche del 10 de octubre de 2006 el procesado, de 44 años, y Beatriz, de 40, se desplazaron en un vehículo de la empresa en la que él trabajaba hasta el denominado paraje 'Pago de Cañizares', en el término municipal de Motril. Accedieron por un camino cercano a la N-323 que a los pocos metros estaba cortado y que hacía necesario el acceso a pie hasta unos canales y partidores que canalizan el agua para el regadío de la vega.

El ahora condenado y la mujer, ambos asturianos, subieron conversando hasta la parte superior, donde, tras llegar a la zona asfaltada, se abren espacios y zonas de paso debidamente protegidos por barandillas para impedir la caída de cualquier persona a los partidores.

Ya en ese punto, bajo circunstancias que los jueces no han podido determinar "con exactitud", José Miguel golpeó en la cabeza a Beatriz con un objeto contundente que presentaba un saliente más o menos cuadrangular, de modo que le perforó el cráneo. A continuación, la condujo en estado de "presumible obnubilación" hacia el rellano existente en el aliviadero, y le quitó prácticamente toda la ropa.

La víctima opuso resistencia "aunque muy aturdida por el golpe recibido", ya que quedaron esparcidos por el lugar abalorios de una pulsera o collar que ella llevaba y tres botones que fueron arrancados de la camisa del acusado. Desde el partidor, Beatriz, aún con vida, cayó de inmediato por la acequia inclinada, a una altura de unos 49 metros, y en la base se destrozó el cráneo, dejando esparcidos múltiples fragmentos óseos.

El inculpado arrojó posteriormente por el mismo aliviadero las ropas de Beatriz y se marchó del lugar, conservando y ocultando en el maletero del coche una pequeña cartera que contenía el DNI de ella, una tarjeta sanitaria y dos tarjetas bancarias a nombre de la asturiana.

El cuerpo sin vida de Beatriz fue descubierto por un acequiero la tarde del día 12, en el denominado primer antepartidor del 'Azud del vínculo', lo que puso en marcha la investigación que pocos días después hizo recaer las sospechas sobre el ahora condenado, quien al día siguiente de cometer los hechos extrajo 300 euros de la cuenta de Beatriz y viajó con su familia a Asturias.

José Miguel y Beatriz, señala la Sección Segunda en su sentencia, se conocían desde hacía mucho tiempo y habían mantenido en los últimos años "fluctuantes relaciones sentimentales".

Mostrar comentarios

Códigos Descuento