Un hombre cumplirá cárcel por agredir a un agente que le pidió que no fuese en bicicleta por la acera

La sección cuarta de la Audiencia Provincial de Valencia ha condenado a un hombre a cumplir una pena de un año de prisión por dar un puñetazo en el pecho a un agente de Policía Local que le pidió que no fuese en bicicleta por la acera, ya que estaba poniendo en peligro a los viandantes.

La sección cuarta de la Audiencia Provincial de Valencia ha condenado a un hombre a cumplir una pena de un año de prisión por dar un puñetazo en el pecho a un agente de Policía Local que le pidió que no fuese en bicicleta por la acera, ya que estaba poniendo en peligro a los viandantes.

De esta manera, el tribunal ha desestimado el recurso de apelación interpuesto por la defensa del acusado contra la sentencia del juzgado de lo Penal número 4 de Valencia, que le condenaba a un año de cárcel por un delito de atentado a los agentes de autoridad.

La defensa del acusado alegó en su recurso que los hechos no poseían entidad suficiente como para fundar un delito de atentado, ya que los estimaba constitutivos de una falta contra el orden público o, en su caso, de un delito de resistencia.

Sin embargo, el tribunal lo desestima en base a diferente jurisprudencia, que señala que se da cabida dentro del delito de resistencia a actitudes activas del sujeto, como por ejemplo braceos, forcejeo, lanzar pies y manos, pero solo en el caso en que éstas fueran respuesta a un comportamiento previo del agente, como ocurriría cuando trata de detenerle.

Esto, según el tribunal, es lo que ocurre en este caso, en el que el agente recriminó al acusado el hecho de que circulara en bicicleta por la acera, y éste, de forma sorpresiva, le dio un fuerte puñetazo. El policía relató en el juicio que "por lo inesperado de la agresión, le dejó desconcertado", afirmando incluso que tardó unos momentos en reaccionar y salir tras él.

Esto hace pensar que se excluiría la aplicación del delito de resistencia y, por su puesto, la falta. Así, entiende "totalmente correcta" la calificación elegida por el juez de lo Penal, "dado que al propinarle ese puñetazo estaría consumando el acto de acometimiento que radica en la base del delito", contempla.

El incidente tuvo lugar el día 29 de junio de 2010, en la calle Granada de Valencia, cuando el acusado, un ciudadano de Ganbia y residente ilegal en España, pegó un puñetazo a un policía que le pidió que no circulase por la acera.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento