El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, remitirá una carta este lunes al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y a los agentes sociales para pedir que rectifique su decisión sobre el cierre en 2013 de la central nuclear de Santa María de Garoña (Burgos) y prolongue su vida útil diez años.

"Nunca es tarde para rectificar, cuando esta rectificación es sensata", subrayó Herrera durante su visita el viernes a la Feria Internacional de Turismo (Fitur) en la que aseveró que el cierre de Garoña fue una decisión "caprichosa" y "personalista" que "no tuvo ningún sentido" desde el punto de vista "económico, social y energético".

El jefe del Ejecutivo regional consideró que tanto la situación económica como los informes técnicos del Consejo de Seguridad Nuclear que permitían diez años más de funcionamiento de la central, determinaban "que la solución era clara", por lo que "había que prorrogar la vida útil.

"El Gobierno sitúa el fin de Garoña en 2013 y con ella la desaparición de un plumazo de más de 1.000 empleos directos e indirectos. Sería una buena noticia, aunque inoportunamente en el marco de otras negociaciones, que mezcla la vida útil de los trabajadores con la energía nuclear, sería muy sensato que rectifique", añadió.

En este sentido, Herrera se mostró "sorprendido" sobre el "desorden" que, a su juicio, se está desarrollando en torno a las negociaciones de la reforma laboral donde "en torno a la edad de jubilación se ha puesto en cima de la mesa la vida útil de las centrales nucleares y un posible cambio de 180 grados en la política nuclear del Gobierno de la nación".