La consejera de Asuntos Sociales, Familia, Juventud y Deporte del Gobierno de Navarra, Maribel García Malo, ha firmado este viernes un convenio con el presidente de la Confederación Española de Organizaciones de Mayores (CEOMA), José Luis Méler y de Ugarte, para avanzar en la colaboración que ambas instituciones mantienen para garantizar el uso racional de inmovilizaciones físicas y farmacológicas en las personas atendidas en residencias de personas mayores.

Por este acuerdo, el departamento de Asuntos Sociales del Gobierno de Navarra se compromete a permitir la realización de análisis de prevalencia y factores clínicos en los centros públicos y concertados de la Comunidad foral y a permitir en estos centros la evaluación que permita un diagnóstico en relación a caídas de los internos, uso de barandillas, problemas de conducta, uso de fármacos psicotrópicos, aspectos organizativos de la atención, y empleo de sujeciones.

En concreto, la consejera García Malo ha explicado que estas intervenciones se llevarán a cabo en los centros El Vergel de Pamplona y Santo Domingo de Estella. Los datos obtenidos podrán ser publicados, dejando a salvo la identificación de los centros colaboradores y para uso en los objetivos del programa 'Desatar al anciano y enfermo de Alzheimer', que impulsa la CEOMA.

García Malo ha puesto de relieve que la eliminación de las sujeciones "no siempre es posible", pero ha defendido que "su uso racional obliga a una atención más individualizada de la persona, mejorar la prevención del riesgo de caídas y el manejo de los síntomas conductuales de las demencias".

Según la consejera, "Navarra es una comunidad pionera y de referencia en este ámbito" y ha destacado que la Ley foral de Servicios Sociales de 2006 "fue una de las primeras normas españolas que estableció una regulación en materia de sujeciones en las personas usuarias de los servicios sociales, con las correspondientes garantías para su empleo".