La portavoz del Consell, Paula Sánchez de León, ha asegurado que el Gobierno valenciano está "perfectamente legitimado" para decir que asumirá "con absoluta normalidad" cualquier medida de racionalización y ajuste que sea necesaria para afrontar la situación porque "hemos sido pioneros en esto".

Sánchez de León, que se ha expresado de esta manera tras el pleno del Consell en relación a las medidas de austeridad que, tanto el PP como el Gobierno central proponen para las comunidades autónomas, ha subrayado que la aplicación de dichas medidas son una competencia autonómica y del presidente de la Generalitat, Francisco Camps.

En relación a la propuesta del PP que se va a tratar en la Convención de Sevilla este fin de semana, en la que se reclama a las administraciones públicas una reducción en el número de asesores y altos cargos, Sánchez de León ha señalado que se apruebe o no esta medida, el presidente Camps "ya lo ha dicho", ya ha declarado que "aplicará medidas de racionalización, austeridad y recorte" en un "nuevo gobierno más ajustado a la realidad económica".

Sánchez de León ha remarcado que "parece lógico que el que tenga la responsabilidad de formar un nuevo gobierno piense cómo debe ser ese nuevo gobierno, más que producir una alteración ahora de las dinámicas de funcionamiento a cuatro meses de una cita electoral".

En este sentido, y a preguntas de los medios, ha señalado que "una cosa son las líneas que se marquen en la convención del PP y otra cosa es la responsabilidad de cada gobierno autonómico" sobre lo que el presidente ya se ha pronunciado "expresamente".

Así, ha subrayado que el Consell ya hizo el primer plan de austeridad "antes de que se hablara de la crisis" y las cosas "se van haciendo de forma ordenada", según "prioridades".

Además, "todas las medidas de racionalidad y austeridad no pasan solamente por un recorte de altos cargos" sino que hay "muchas otras que venimos aplicando".

En cuanto a la exigencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para que las autonomías sean austeras y la posibilidad de limitar la capacidad para emitir deuda pública, Sánchez de León ha subrayado que el Consell "lleva tiempo aplicando medidas de austeridad" y "afrontaremos todas las situaciones con rigor y coherencia".

Preguntada por si existe "inquietud" por la posibilidad de que se produzca un "colapso financiero" si se limita la capacidad de la Generalitat para emitir deuda pública, la portavoz del Consell ha afirmado que "ni tenemos inquietud ni miedo", ya que la Generalitat, "desde hace mucho tiempo, antes que el Gobierno de la nación, viene aplicando medidas de austeridad en el gasto". Así, ha remarcado que ésta "es una competencia de la Generalitat" que, además, "venimos aplicando".

En este sentido, ha recordado los dos planes de austeridad para ahorrar 1.000 millones de euros en dos ejercicios presupuestarios y la revisión del sector público valenciano.

"Estamos perfectamente legitimados para decir y que la gente entienda que asumiremos con absoluta normalidad, porque hemos sido pioneros en esto, cualquier medida de racionalización y ajuste que sea necesaria para afrontar la situación", ha declarado. 350 EUROS

A preguntas de los medios sobre la propuesta del Gobierno central para reducir las ayudas a los parados a 350 euros y que lo asuman las comunidades autónomas, Sánchez de León considera que esto es "un ejemplo más de lo que ha estado haciendo el Gobierno de España, por desgracia para los españoles, en los últimos años".

Así, ha criticado que el Gobierno "traslade su responsabilidad" a las comunidades y "desde la Generalitat no estamos dispuestos a admitir, ni a ser cómplices, ni a colaborar con estos desmanes del presidente del Gobierno".

Inquirida por si la Generalitat se declarará en "rebeldía" si el Gobierno decide aplicar esta medida, la portavoz del Consell se ha mostrado convencida de que, una vez planteadas sus consideraciones al Gobierno y si "impera el sentido común, entenderán perfectamente las razones y no habrá que llegar a situaciones extremas".