Por ello, la entidad ha hecho llegar al conseller del ramo, Alejandro Font de Mora, un escrito en el que solicita que estos criterios de accesibilidad sean tenidos en cuenta en el diseño de los nuevos centros concertados que se planteen construir en un futuro, con el objetivo de garantizar a los estudiantes con discapacidad principios como la accesibilidad universal, la igualdad de oportunidades y la autonomía personal, ha informado el colectivo en un comunicado.

En este documento, la entidad de utilidad pública ha ofrecido su colaboración a la Conselleria a través de su Agencia para la Defensa y Promoción de la Accesibilidad (Adepa), cuyo objetivo es fomentar un entorno urbano, arquitectónico o comunicativo susceptible de ser utilizado por cualquier ciudadano en condiciones de igualdad. De este modo, Adepa ha mostrado su disposición para ofrecer a la Conselleria d'Educació información y asesoramiento sobre accesibilidad en los nuevos centros educativos que proyecte.

Carlos Laguna, presidente de Cocemfe CV, ha destacado la importancia de contemplar la accesibilidad desde la primera etapa del proyecto.

"Es fundamental tener en cuenta las cuestiones de accesibilidad desde el diseño de los centros, ya que de esta forma se garantizan derechos y se ahorra el coste de actuaciones de rectificación posteriores. Además, se aseguran las mejores condiciones para que el alumno con discapacidad estudie con normalidad y pueda mejorar su calidad de vida en el futuro", recalca.

Para Cocemfe CV, la educación "constituye uno de los factores más determinantes en la lucha contra la desigualdad, la exclusión social y la pobreza". Por este motivo, añade, "el fomento de la educación inclusiva es una de las principales líneas de actuación de la organización sin ánimo de lucro".

En al misma línea, recalca que la educación inclusiva pretende incorporar los principios de accesibilidad universal, igualdad de oportunidades y no discriminación en los procesos de enseñanza. De este modo, insiste en la detección precoz de las necesidades específicas, el acceso normalizado a los recursos educativos, los planes de gestión de la diversidad y la flexibilidad de las metodologías de aprendizaje.

Por último, recoge la necesidad de formación del profesorado en referencia con la discapacidad, la coordinación de los profesionales que imparten los diferentes niveles y la adecuada orientación psicopedagógica con el objetivo de posibilitar el tránsito del alumnado con discapacidad entre las distintas etapas educativas.