Esto es justamente lo que está haciendo, desde hace unas semanas, el Ajuntament de Barcelona durante una campaña que pide más precaución para evitar accidentes con los motoristas.
Desde la vía pública
Por si no fuera suficiente contradicción que el propio Ajuntament incumpla su ley, cabe recordar que la campaña de seguridad la dirige el área de vía pública.
La semana pasada, el Ajuntament hizo balance de los primeros días de la aplicación de la nueva ordenanza y explicó que la Guàrdia Urbana interpuso 350 denuncias por hacer pintadas o por colocar publicidad en los parabrisas.
Estas infracciones son sancionadas con multas de entre 120 y 750 euros.
Fuentes de la Guàrdia Urbana explicaron ayer que la distribución de esta campaña se ha encargado a una empresa privada.
Sin publicidad
Artículo 23.5: Es el punto de la nueva ordenanza que prohíbe poner publicidad en la parte exterior de los vehículos o distribuir publicidad o cualquier material similar en la vía pública.
Hay que mantener la calle limpia: El objetivo de este punto es evitar que los ciudadanos tiren la publicidad al suelo cuando llegan a su vehículo y ven un anuncio.
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