UGT y CCOO advierten de que si no se alcanza "un pacto global" sobre pensiones y materia laboral, "habrá huelga general"

Los sindicatos se concentran frente a la sede del INSS en Pamplona para mostrar su rechazo al retraso de la jubilación
Concentración de UGT y CCOO contra el retraso de la edad de jubilación.
Concentración de UGT y CCOO contra el retraso de la edad de jubilación.
EP/CCOO
Concentración de UGT y CCOO contra el retraso de la edad de jubilación.

UGT y CCOO han advertido de que si no se alcanza un "pacto global" en materia de pensiones, negociación colectiva, y reforma del mercado de trabajo, "seguirá el conflicto y el calendario de movilizaciones y habrá huelga general en el país" en contra de "las agresiones que está impulsando el Gobierno".

Así lo han expuesto los secretarios generales de UGT y CCOO de Navarra, Juan Goyen y José María Molinero, respectivamente, durante la concentración que los dos sindicatos han realizado frente a la sede del Instituto Nacional de la Seguridad Social en Pamplona para mostrar su rechazo al retraso de la jubilación a los 67 años.

En declaraciones a los medios de comunicación, Goyen ha advertido de que "si la negociación con el Gobierno central en materia de reforma de pensiones, reforma laboral, negociación colectiva, y política económica se trunca, UGT y CCOO responderán con la dureza que sea necesaria". "Si es necesaria una huelga general, habrá una huelga general", ha asegurado.

Así, Goyen ha explicado que los sindicatos han decidido "presionar en la calle" y ha defendido la "necesidad" de "un pacto de Estado" para que "los trabajadores y los ciudadanos salgan más juntos y con menos apertura de la brecha social".

En cuanto al sistema público de pensiones, el dirigente de UGT en Navarra ha abogado por que la reforma "se realice primero por la vía de los ingresos". "Hay muchas fuentes de financiación del sistema que no se están utilizando, incluso habiendo acuerdo para ello", ha criticado.

En esta misma línea, ha defendido que "la reforma no llegue por la vía del recorte del gasto, de forma que dentro de diez años seamos el país de Europa que menos gasto tiene por PIB".

Por su parte, el secretario general de CCOO de Navarra, José María Molinero, ha incidido en que esta concentración, como las celebradas en el resto de España, "no es un acto de movilización masiva y de fuerza", sino "un aviso" al Gobierno central.

Así, ha asegurado que "si no se llegan a acuerdos y el Ejecutivo impone medidas en la dirección planteada, seguirá el conflicto, seguirá el calendario de movilizaciones y habrá huelga general en el país".

"Queremos que el conjunto de los partidos políticos, la patronal, el Gobierno y las organizaciones sindicales busquemos un pacto global en materia de pensiones, negociación colectiva, y reforma del mercado de trabajo", ha resumido. "Si esto es posible, habrá acuerdo, si no, habrá movilización", ha insistido.

Molinero ha defendido "un acuerdo en materia de pensiones que ataje el problema por la vía de la contributividad, de incorporar al sistema más recursos y no por la vía de los recortes". "El sistema de pensiones de España es el más fuerte, el más sólido, el más solvente de todos los sistemas que hay en Europa. En este país es donde más tarde se jubila la gente, con una media de 63 años, y el sistema tiene superhábit y lo seguirá teniendo", ha asegurado.

Huelga del 27

De enero

Por otro lado, Molinero se ha referido a la huelga general convocada para el 27 de enero por ELA, LAB, STEE-EILAS, EHNE e HIRU contra la reforma de pensiones y ha defendido que UGT y CCOO "no pueden sumarse a una huelga que no va en defensa del sistema público de pensiones".

"No vamos a entrar a entrar en descalificar ningún tipo de movilización, pero nos gustaría que se clarificara por parte de los convocantes cuáles son las causas que la motivan, porque, según los propios documentos internos de las organizaciones, están convocando una movilización para poder decidir en el marco de Euskadi un sistema propio de pensiones", ha afirmado.

Según Molinero, "esto rompería la caja única de la Seguridad Social y, además, pondría en jaque a los trabajadores vascos porque la caja única está soportando un déficit anual de entrada y salida en materia de pensiones en la Comunidad Autónoma Vasca por encima de los 500 millones de euros".

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