La Federación de Trabajadores de la Enseñanza (FETE) de la Unión General de trabajadores (UGT) Aragón ha criticado que el VI Convenio Colectivo para centros educativos concertados "esté paralizado desde hace dos años" y que "no se vislumbre un próxima firma". El V Convenio, cuya vigencia terminó el 31 de diciembre de 2008, es el de referencia actualmente.

Así lo ha indicado la secretaria general de la Federación de Trabajadores de la Enseñanza (FETE) de UGT-Aragón, Gloria Pardillos, en una rueda de prensa celebrada en la sede del sindicato en Zaragoza. Pardillos ha estado acompañada por el responsable del sector de la enseñanza concertada, Sergio López.

La secretaria general de

Fete ugt-Aragón ha dicho que los docentes de enseñanza concertada son "mano de obra barata" por un convenio "impuesto por las patronales" y por una "cierta explotación" del personal, que recibe una "inferior consideración al de los centros públicos".

Respecto a la negociación en la mesa sectorial del convenio colectivo, el sindicato ha instado al Ministerio de Educación a que la convoque y "replantee" el VI Convenio Colectivo Estatal de centros sostenidos por fondos públicos, en el que, según UGT, "no hay avances".

Pardillos ha criticado que el convenio "no dé respuesta a las necesidades laborales" de centros regulados por los Presupuestos Generales del Estado y de la Comunidades Autónomas, lo que contribuye a la "precarización de la mano de obra".

La mesa sectorial "está absolutamente paralizada y sin visos de avanzar", ha subrayado Pardillos, ya que el Ministerio de Educación, la Administración autonómica, las patronales y el sindicato mayoritario —Federación de Sindicatos Independientes de la Enseñanza (FSIE)— "siguen como si nada" ante una situación "diagnosticada y definida".

Por eso, la secretaria general de FETE de UGT-Aragón ha hecho un llamamiento ante la situación de un sector que "necesita un toque de atención" y una "solución inmediata" para realizar las mejoras pendientes.

Más de 55.000 ALUMNOS

El sector de la educación concertada atiende a más de 55.000 alumnos en la Comunidad aragonesa y da trabajo a más de 5.000 personas, entre personal docente y complementario. En total, suman 106 centros escolares, de los cuales 83 están en Zaragoza, 17 en Huesca y seis en Teruel. El sector no tiene presencia en la escuela rural.

La representante sindical ha afirmado que la educación concertada es un sector "muy estable" al que "no ha afectado la crisis", puesto que ha contado con acuerdos que "han permitido recolocar trabajadores en otros centros".

Este sistema, según UGT, es "barato para las administraciones", ya que "ahorran en gastos de personal y mantenimiento". Al respecto, ha señalado que un puesto de trabajo en un centro escolar concertado cuesta a la administración un 70 por ciento de lo que supone un puesto escolar público, ya que existen "menos profesores por grupo", "jornadas más amplias" y "salarios inferiores".

Gloria Pardillos ha puesto de manifiesto las diferencias salariales entre los trabajadores de centros públicos y concertados que puede suponer "hasta un 30 por ciento de diferencia".

Sólo lo negativo

Pardillos ha resaltado que el profesorado de centros concertados está siendo "asimilado" al personal docente de centros públicos en las cuestiones negativas, como recortes salariales, congelación o acuerdos restrictivos, al tiempo que no participa de las ventajas, como el cobro de sexenios, ayudas sociales, plan Concilia, reducción de jornada para mayores de 55 años, año sabático o jubilación incentivada.

La representante sindical ha destacado que muchas familias optan por los centros concertados a pesar de que "adolecen de falta de personal, recursos y, a veces, de infraestructuras" y en los que se valora más "la escolarización homogénea y la poca diversidad del alumnado".

En este sentido, Pardillos ha señalado que los centros concertados no acogen alumnos con necesidades educativas especiales porque afirman "no tener recursos" y las administraciones no otorgan recursos porque los centros no acogen a estos alumnos, lo que supone "un círculo vicioso" que "deben romper las administraciones" para contribuir en la distribución del alumnado.

Otras reivindicaciones

El sindicato exige a la patronal voluntad para la firma del convenio y la "redefinición" de los conceptos de lectivo y no lectivo, que no se ha abordado desde los años setenta del siglo pasado, así como la "dignificación" social, laboral y profesional de los no docentes.

En cuanto a las administraciones, UGT les reclama la consideración de los centros concertados en términos de equidad con los centros públicos, que no se da "ni en retribuciones, ni en jornada, ni en plantillas, ni en recursos para los servicios de comedor y transporte, ni en la consideración del PAS", ha apuntado Pardillos.

Por ello, UGT exige al Ministerio de Educación un nuevo Decreto de Normas Básicas del Concierto para conseguir la equiparación salarial definitiva, el incremento del profesorado que contribuya a la equiparación de plantillas y la reducción de la carga lectiva, el reconocimiento de los sexenios en todas las Comunidades autónomas y su financiación, la incorporación del personal no docente y complementario a la situación de pago delegado y los apoyos necesarios para incluir a los alumnos con necesidades educativas especiales.

Al Gobierno de Aragón, el sindicato ha pedido la redefinición de la carga lectiva adaptando el Reglamento de Organización de los Centros, el reconocimiento de la función directiva, la dotación adicional en Secundaria para reducir la carga lectiva, las becas de comedor y transporte para el alumnado que lo solicite, la adaptación del módulo de otros gastos al coste real de funcionamiento, la consideración como docentes de logopedas y psicólogos en Educación Especial y la extensión del complemento autonómico al personal de administración y servicios y al personal complementario.