Los Departamentos de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes y de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón han puesto en marcha el Manual de Buenas Prácticas Medioambientales, cuyo objetivo es conseguir mejoras en la integración de los aspectos medioambientales en las obras relacionadas con las carreteras de titularidad de la Comunidad autónoma.

Los consejeros de Obras Públicas, Urbanismo y Transporte, Alfonso Vicente, y de Medio Ambiente, Alfredo Boné, han presentado este lunes en el Edificio Pignatelli este Manual a empresarios y representantes del sector. La publicación se puede consultar en la página web 'carreterasdearagon.es'.

El consejero de Obras Públicas, Alfonso Vicente, ha señalado en declaraciones a los medios de comunicación que "las empresas que quieran trabajar con la administración tendrán que hacer las cosas bien, además de tener el impacto ambiental positivo, e ir dando pasos, poco a poco, en hacer las carreteras más sostenibles".

Vicente ha precisado que si bien los informes de impacto ambiental "nos garantizan que no hacemos ninguna barbaridad, queremos ir más allá" y, por eso, en los pliegos de condiciones para adjudicar las actuaciones en carreteras se tendrán en cuenta las buenas prácticas medioambientales.

El consejero ha comentado que ya hay pliegos "que recogen estas mejoras" y, por ejemplo, se contemplan en el Proyecto Red. Ahora, "una vez que tenemos el Manual" se aplicará a través de normas concretas "que vamos a recoger en los pliegos y que van a tener una valoración" para que "cada vez tenga más peso a la hora de las adjudicaciones".

Más allá de la estricta obligación

El consejero de Medio Ambiente, Alfredo Boné, ha explicado que este manual es una muestra de que "el Gobierno de Aragón quiere ir mucho más allá de su estricta obligación" ya que la preservación de la sostenibilidad desde un punto de vista medioambiental en las obras públicas está "garantizada por la ley de Protección Ambiental de Aragón y por el cumplimiento de todas las tramitaciones ambientales".

Según Boné, con este manual, se trata de profundización en cuestiones ambientales que "no tienen que encarecer las obras públicas" ya que "normalmente, cuando las empresa hacen sus procesos más sostenibles lo que obtienen es un beneficio en los costes de producción".

Por eso, ha defendido que actuar de forma sostenible "no es más caro, sino más barato y probablemente genera algún puesto más de trabajo, sobre todo en el mundo del reciclaje".

Asimismo, ha indicado que esta medida entronca con la Estrategia Aragonesa de Cambio Climático y Energías Limpias y se encuentra entre las medidas del Plan de Acción propio del Gobierno de Aragón para la mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero y de adaptación al cambio climático. MANUAL

El Gobierno de Aragón ha apuntado que a partir de ahora se dará preferencia en la ejecución de las obras de carreteras a la reutilización de los residuos generados en la propia obra y al uso de materiales reciclados —polvo de neumáticos, residuos de construcción y demolición, escorias de acería, polímetros- frente al uso de otros materiales, siempre que su utilización sea técnica y económicamente viable.

Además, el Ejecutivo ha argumentado que las buenas prácticas ambientales no deben basarse tanto en cambios o mejoras de las tecnologías o infraestructuras, sino apoyarse en la mejora de los hábitos de trabajo ya que "la buena gestión ambiental es resultado de la adecuada cualificación, formación y sensibilización de los trabajadores".

El Manual de Buenas Prácticas Ambientales se estructura en dos bloques. El primero es común a todas las actividades desarrolladas en la construcción y conservación de carreteras.

Su finalidad es conocer los impactos que estas actividades pueden generar para evitarlos e identificar el origen de las afecciones y, de esta forma, llevar a cabo las medidas para prevenirlos, reducirlos o mitigarlos.

El segundo bloque reúne un conjunto de fichas de buenas prácticas ambientales en la construcción de carreteras y fichas de buenas prácticas ambientales en la conservación de carreteras.

El Manual se ha diseñado de tal forma que las fichas pueden ser extraídas y ubicadas en el puesto de trabajo, con el objeto de que los trabajadores conozcan las buenas prácticas relacionadas con su actividad habitual y contribuyan así a minimizar los impactos medioambientales.