Jared Lee Loughner, presunto autor del tiroteo que el sábado pasado provocó seis muertos en Tucson (Atrizona), reservó habitación en un motel, compró munición y se tomó fotografías la noche anterior en ropa interior de color rojo con una Glock semiautomática, el mismo modelo que utilizó en la matanza.

Las fotos han llegado a manos de la Policía gracias a una sucursal de la cadena Walgreens a la que acudió Loughner para el revelado. En algunas de las tomas acerca el arma a su entrepierna y en otras, presumiblemente tomadas frente al espejo, la sujeta cerca del trasero. Todavía se desconoce dónde hizo las fotografías.

El Departamento de Policía del Condado de Pima (donde se encuentra Tucson) descubrió que el joven subió una de las fotos y escribió "Adiós amigos" en su cuenta de MySpace a primera hora del sábado.

Además, una fuente anónima de las autoridades ha comunicado a The New York Times que el FBI tiene vídeos sobre el tiroteo, gracias a la grabación de las cámaras de vigilancia del centro comercial donde tuvo lugar.

Los investigadores estudian ahora también las conversaciones que mantuvo Loughner por Internet en la página de un juego de estrategia. En ellas protestaba por el elevado desempleo y denunciaba que la educación que recibió estaba diseñada para esclavizar. Asimismo habla de sus enfrentamientos con los profesores en sus estudios actuales.

Bajo el pseudónimo 'Dare' (Reto) niega haber consumido drogas y critica la "estafa" que supuso en su caso el sistema de educación. Loughner cuenta que había sido despedido de cinco empleos, entre ellos un restaurante en el que sufrió una "crisis mental".

A mediados de junio comentó que pese a pedir trabajo en 67 sitios diferentes, no le habían llamado de ninguno de ellos, algo que achacaba a una cuestión de discriminación.