UGT-PV ha lamentado en un comunicado, tras conocerse los datos del IPC, que sean las rentas del trabajo las que están padeciendo "doblemente" la crisis al sufrir "por un lado, con los recortes de salarios y pensiones y, por otro, por los sucesivos incrementos tarifarios y de impuestos indirectos, como la subida del IVA, que se ha producido durante el año 2010".

El sindicato ha alertado de las "graves consecuencias económicas y sociales" en caso de persistir el incremento de precios y ha exigido el "desbloqueo efectivo" de la negociación colectiva, "de manera que se respeten los compromisos del Acuerdo para el empleo y la Negociación Colectiva 2010-12, especialmente los referidos a la inclusión de la cláusula de revisión salarial de todos los convenios, ya que actualmente sólo están cubiertos por ella el 45,6 por ciento de los trabajadores y trabajadoras".

De acuerdo con

Ugt pv, el IPC ha terminado 2010 en el 3 por ciento, "lo que supone una mala noticia, sobre todo, teniendo en cuenta que, según todas las previsiones, 2011 se iniciará con tensiones inflacionistas debido, entre otras cuestiones, a la subida de la luz 9,8 por ciento, del gas 4 por ciento, y las tarifas de muchos de los servicios que se prestan, unido al nulo crecimiento y las elevadas tasas de desempleo".

Por otra parte, ha subrayado que esta situación "viene a sumarse a las medidas socialmente injustas y contrarias a las necesidades de la economía como la congelación de las pensiones y del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples, el recorte de los salarios de los empleados públicas o el incumplimiento de los compromisos en relación al Salario Mínimo Interprofesional".

UGT-PV ha recalcado que son "centenares de miles los trabajadores y trabajadoras que han perdido parte de su poder adquisitivo durante el año 2010, ya que el incremento salarial medio en el año se ha situado en el 1,4 por ciento", y ha recordado que otros colectivos "han visto incumplidos acuerdos y convenios, como los cerca de 17.000 trabajadores del sector cerámico, cuyas tablas de este año están por actualizar a pesar de una sentencia del Supremo, sin olvidar a los empleados públicos y jubilados y pensionistas, que son los más perjudicados por la tensión inflacionista".