Según las acusaciones, el acusado tomó su coche borracho y tras haber fumado cannabis, dirigiéndose hacia la discoteca Manhattan a una velocidad de 110 kilómetros por hora, aunque solo podía hacerlo a 40. Esta discoteca se encuentra ubicada en el Polígono SEPES de la capital oscense.

El presunto autor tiene 22 años y lleva en prisión tres años y medio. Se le atribuyen dos delitos de homicidio, dos de lesiones muy graves, cinco de lesiones y una falta.

El juicio dará comienzo a las 10.15 horas del próximo lunes y se desarrollará hasta el jueves. Durante este tiempo pasarán por la Audiencia 44 testigos y 6 peritos.

El primer día, se procederá al interrogatorio del acusado y declararán dos policías nacionales y cuatro locales. También comparecerá un facultativo adscrito al Servicio de Toxicología del Hospital Clínico Universitario 'Lozano Blesa' de Zaragoza, un vigilante de la empresa de seguridad Segur Ibérica, así como los ciudadanos Luis Guiró y María del Carmen C.R.

Al día siguiente, martes 11 de enero, lo harán los ocho heridos y algunos testigos y el día 12 continuarán los testimonios.

El día 13 de enero se practicarán las pruebas periciales, con la comparecencia de los doctores María Ángeles M.I. e Isabel M.C., forenses, para que ratifiquen y amplíen sus informes sobre la autopsia de las dos víctimas mortales, sobre la naturaleza de las heridas, la causa de la muerte, así como las lesiones y secuelas sufridas por los perjudicados.

El mismo día comparecerá un capitán de la Guardia Civil, así como dos agentes del mismo Cuerpo para que ratifiquen y amplíen el informe pericial levantado previamente para reconstruir el accidente.

También el 13 de enero declararán los psicólogos del Instituto de Medicina Legal de Aragón Cristina Andreu y María Victoria Minués para que den cuenta del informe que levantaron sobre la situación psicológica del encausado. La empresa aseguradora La Estrella podría comparecer el mismo día para presentar su prueba pericial.

En el juicio se personan la defensa y trece acusaciones particulares, teniendo representación también la compañía aseguradora del coche que conducía el acusado en el momento del atropello, como presunta responsable civil y la madre del mismo, propietaria del vehículo, como responsable civil subsidiaria.