El director de Energía del Ministerio de Industria y el secretario del PSCL, Antonio Hernández y Óscar López, respectivamente, han mostrado hoy su esperanza de que el Decreto de ayudas al carbón autóctono salve el próximo día 10 de enero en Luxemburgo su último obstáculo, después de que el Supremo denegara las medidas cautelares invocadas por las eléctricas, y pueda entrar en vigor lo antes posible para paliar la grave situación en la que se encuentran muchas empresas mineras en Castilla y León.

La postura coincidente de ambos mandatarios se ha escenificado hoy en Valladolid durante una jornada de trabajo, la primera del PSCL en 2011, centrada con carácter monográfico en el análisis sobre el futuro del carbón y en la que han participado también alcaldes y concejales de los ayuntamientos de las cuencas mineras y la eurodiputada vallisoletana Iratxe García.

El mensaje unánime lanzado durante el encuentro, en palabras del máximo responsable de los socialistas castellanoleoneses, Óscar López, es que el Gobierno y el PSOE seguirán luchando "en solitario", frente al PP y las eléctricas, en defensa del carbón nacional por su carácter "estratégico", ya que es la única fuente fósil propia con que cuenta un país como España que es dependiente al cien por cien en suministro de gas y petróleo y porque, como así ha incidido el representante ministerial Antonio Hernández, "el mix energético español no puede mirar al futuro sin el carbón doméstico".

Por ello, ambos confían en que Luxemburgo se posicione en la misma línea del Supremo y desbloquee de forma definitiva el día 10 de enero el Decreto de ayudas al carbón nacional aprobado por el Gobierno de Rodríguez Zapatero y que "establece un servicio público que obliga a las eléctrica a quemar ese mineral, sin distorsionar el mercado", ha precisado Hernández, quien ha añadido que, salvado ese último trámite, "la idea es adelantar las ayudas en los próximos días para insuflar esa liquidez esencial que precisan las empresas mineras para pagar los salarios de los trabajadores".

El director general de Energía del Ministerio de Industria ha apostado también por "mejorar la ejecución" de las ayudas que Castilla y León recibe cada año procedentes del Instituto para la Reestructuración de la Minería del Carbón y Desarrollo Alternativo de las Comarcas Mineras, un 18 por ciento de las cuales se dirigen a infraestructuras y otro 5 por ciento a proyectos empresariales. Al respecto, Hernández ha advertido de que en un futuro la selección en materia de infraestructuras priorizará aquellas que sean "más relevantes en creación de empleo y dinamismo económico".

Rajoy es el fin del carbón

Por su parte, el socialista Óscar López ha aprovechado para recordar que el sector de la minería no contaba con futuro alguno hace cuatro meses y que hoy cuenta con un "futuro limitado" gracias al Gobierno central y la lucha mantenida hasta el momento por el PSCL, gracias al Decreto de ayudas al carbón nacional y a ese reglamento europeo que amplía el horizonte de subvenciones a 2018, y todo ello frente al PP, su eurodiputado Aleix Vidal-Quadras, la Xunta de Galicia y las eléctricas.

"Hemos conseguido salvar una primera bola de partido", sostiene López, quien advierte igualmente de que si Rajoy vence en las próximas elecciones generales "la que no tendrá futuro alguno será la minería del carbón".

En cuanto a las ayudas que reciben las cuencas mineras para su reactivación económica, el político socialista ha criticado la falta de coordinación existente entre los fondos procedentes del Miner, el Plan de Convergencia, la Ley de Desarrollo Rural o la Agenda de la Población, entre otros, de ahí su compromiso de, en caso de ganar las próximas elecciones autonómicas, "poner sobre la mesa un mapa de la Comunidad para conectar todas esas políticas. De lo contrario, es un sinsentido porque no son más que meros parches inconexos", ha sentenciado.