El presidente de Cantabria y secretario general del Partido Regionalista de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, aspira a ganar al frente de su partido las elecciones de autonómicas de 2011 y lograr así la "culminación" de su carrera política.

Es lo que el líder regionalista tiene "entre manos" en estos momentos: una campaña "puerta a puerta" con la que quiere sacarse las "espinita" que reconoce que siente de no haber ganado unas elecciones, ya que está al frente del Gobierno de Cantabria en virtud del pacto que alcanzó en 2003 con el Partido Socialista.

Para Revilla ese logro sería el "sumum" y el "ramo" de la "siega", según ha manifestado en una entrevista con Radio Nacional de España en Cantabria en la que ha participado Europa Press.

El secretario general de los regionalistas, recientemente reelegido al frente del partido y como candidato, se siente "moralmente autorizado" a tener la "alegría" de "ganar las elecciones en mi tierra a los dos grandes", un reto que admite que es "muy difícil", "casi imposible".

Entre otros motivos, Revilla explica esto porque "esto no es Euskadi o Cataluña" y su partido "no es el PNV", y en Cantabria se carece de un factor como la lengua.

Pero Revilla también se ha marcado el reto de ganar las elecciones "en el peor momento histórico", por la situación de crisis, que provoca que "cuando las cosas van mal paga el pato el que está gobernando" mientras que al PP "sin hacer nada le va a caer la fruta en la mano".

En cualquier cosa, anticipa que en dos años Cantabria va a estar "mejor", y que ya 2011 será un año de "despegue económico".

Si consiguiera situar al PRC como primera partido en las elecciones autonómicas, el secretario general y candidato se "echaría a llorar".

"Diré: gracias, habéis hecho a Revilluca el tío más feliz del mundo", ha expresado, y ha añadido que tiene "ilusión" y se siente "bien" para afrontar este reto, tras sus problemas de salud.

"enemigo a batir"

El presidente cántabro espera subir los votos regionalistas en detrimento de los demás partidos, si bien admite que no sería bueno que uno de los socios de coalición bajara, como es el caso del PSOE, que en 2007 pasó a ser el tercer partido de Cantabria mientras el PRC se convirtió en el segundo.

Revilla defiende que la coalición "ha sido buena" porque el PSOE "ha introducido políticas que eran impensables", entre las que ha destacado las ayudas a la dependencia.

El dirigente regionalista ha explicado que ve a su partido como un "instrumento para que Cantabria mejore", por lo que pide a sus socios que "pongan por encima de sus resultados electorales si Cantabria ha mejorado".

El presidente cántabro avanza que centrará la campaña en "vender" su gestión. "Yo no me voy a meter con nadie", advierte, tras asumir que el PRC ahora es "el enemigo a batir" por que es como "una mosca" que no estaba "invitado" ya que "lo normal" en España es que haya dos grandes partidos.

Así, ha afirmado que dirá a sus compañeros de partido que tampoco se "metan con nadie", y ha recordado que sus antiguos socios de gobierno del Partido Popular tuvieron "alguna tentación" en la última legislatura juntos. "Y el resultado no fue bueno para ellos", ha apostillado.

Revilla reivindica que el PRC es una "cosa especial", pues ha demostrado que en la oposición es "duro y contundente", pero que luego "sabe gobernar", al introducir "cordura y seriedad" con su política de pactos, con los que en su día llevaron la "estabilidad" a Cantabria "por primera vez".

Y defiende que el Ejecutivo cántabro es "más estable" que en las autonomías donde hay gobiernos con mayoría absoluta.

De cara a las elecciones generales, a las que su partido ha aprobado presentarse en la próxima convocatoria, Revilla ha señalado que es algo que se lo piden personas "de toda España", pero ha precisado que "la gente no sabe lo que son unas elecciones generales", en las que se concurre por circunscripciones.

En el caso de Cantabria, cree que sacaría "como mucho" dos diputados.