No le preocupan los análisis sobre su campaña porque cree que "lo peor que puede hacer un político es dar pasos en función de lo que lee" Considera que los ciudadanos están ahora "más preocupados de la crisis que de quién va a ser el próximo alcalde"

El candidato del PSOE a la Alcaldía de Sevilla, Juan Espadas, se define como un "corredor de fondo" al que "tomarle el pulso a los 800 metros y ver si va a ser capaz de hacer un 'sprint' en los últimos 100 metros tiene poco sentido".

En una entrevista con Europa Press, Espadas se muestra "muy satisfecho de la acogida, aliento y respaldo tanto a nivel de los compañeros de partido como el que se va detectando en cada uno de los barrios" y asegura que el "ambiente" que se encuentra en éstos es "mezcla de incertidumbre por el momento de crisis y esperanza de que en Sevilla hay muchas cosas que hacer y hay que arrimar el hombro".

"Hay bastante proximidad a la hora de entender q el candidato socialista puede ser la persona q lidere ese proyecto político nuevo, fresco, que necesita la ciudad", afirma el alcaldable del PSOE, quien dice que hasta diciembre ha estado en "una primera fase de rodaje, de escucha activa a los ciudadanos, para conocer bien la sociedad civil articulada y las personas que en los barrios quieren acercarse a trasladar sus inquietudes, los problemas que detectan del día cotidiano".

No obstante, anuncia que "a partir de enero el ritmo cambia" y avanza que "va a culminar esa recogida de preocupaciones, demandas y propuestas", de modo que "a lo largo de enero y primeros de febrero se conviertan esas cuestiones en propuestas para el programa de cada uno de los distritos, para que tengan muchos elementos cercanos que generen ilusión en los ciudadanos, y el proyecto a escala metropolitana, de ciudad, con temas horizontales y cuestiones de calado que deben ser los motores del próximo mandato".

Por tanto, precisa que este trabajo permitirá "desde finales de febrero hasta abril trasladar al mayor número de personas posibles cuáles son las propuestas a escala de ciudad y de barrios", de forma que "de una vez por todas un programa electoral sea el elemento sobre el que gire la toma de decisiones para el voto, que los ciudadanos decidan, no en base a un estado de opinión general, sino a la información de cuáles son compromisos los concretos que le plantean los candidatos".

"Estamos siguiendo escrupulosamente nuestra hoja de ruta", apunta Espadas, que explica que, a su juicio, en lo que a atención mediática se refiere, "hay que modular los tiempos más porque los grandes mensajes o propuestas deben estar en el debate público justo cuando se presenten los programas", momento que sitúa a finales de febrero. "Estamos hablando de tres meses antes de las elecciones, es suficiente", asegura.

Asimismo, destaca que "hay un segundo nivel, en el que a veces los medios reparan menos y es el más importante, el trabajo que se hace a escala de vecino, de asociación, de barrio", lo cual admite que "puede generar a veces la opinión de que no se sabe qué está haciendo el candidato del PSOE".

"Ese trabajo de campo, silencioso, callado, de acercamiento a las personas, que no piensa solo en los titulares sino en el contenido, es muy importante, precisamente porque está llenando de contenido esas propuestas", insiste Espadas, quien asegura que "hay que dedicar muchas horas a hablar, no en visitas a barrios de cinco minutos con fotos".

Por tanto, dice entender la "aceleración que quieren imprimir los medios fruto de que trabajan sobre la clave de la actualidad", pero considera que "lo peor que puede hacer un político es dar los pasos en función de lo que lee en los periódicos cada día, porque eso significa que no sabe lo que quiere, que no tiene un proyecto claro ni un programa de trabajo estructurado".

"En una carrera de fondo lo importante es ver cuál es el resultado final y la confianza que se ha generado el 21 de mayo cuando los ciudadanos hagan su jornada de reflexión y, por lo tanto, no me preocupa en absoluto los análisis sobre estrategias de campaña, me interesa es la opinión de los ciudadanos sobre si cuando yo me acerco a ellos genero confianza", añade.

En esta línea, reitera que para él es "más importante qué comunico y cómo me acerco al interlocutor que el formato publicitario o el tratamiento en un medio" y considera que el hecho de haber superado el 50 por ciento en nivel de conocimiento a mitad de recorrido "es mucho más de lo que el candidato del PP consiguió en la primera mitad de su recorrido".

De igual modo, garantiza que tampoco le preocupa el nivel de conocimiento, dado que eso es "simplemente cuestión de constancia, de no parar de moverse, de dedicarle muchas horas" y añade que "el 22 de mayo ése no será el problema, el problema siempre tiene que ser el contenido, las propuestas que conciten esperanza, ilusión y confianza para que las personas te apoyen".

Por tanto, opta por "esperar un poco más" para hacer encuestas sobre intención de voto, "porque no tendría sentido que a un corredor de fondo de una carrera de obstáculos cuando lleva 800 metros se le tome el pulso", además de que "un buen porcentaje de ciudadanos no dice claramente a quién va a votar hasta muy al final".

En esta línea, apunta que "el votante de centro-izquierda es mucho más remiso a manifestar su intención de voto hasta que está más cerca que el votante conservador", aunque reconoce que "hay un buen porcentaje de ciudadanos que ahora mismo no tiene decidido su voto o que, sin son votantes de una opción política, por la crisis se manifiestan en una posición no activa a participar en el proceso electoral".

Llamamiento a la participación

"Eso va a ir cambiando, porque creo firmemente en la responsabilidad de los ciudadanos de no inhibirse en algo tan importante como la elección de su Ayuntamiento", augura el alcaldable socialista, que insta a todas las fuerzas políticas a "hacer mucho hincapié en que la participación en elecciones es la esencia de la democracia, no puede haber un alcalde elegido con la participación de menos del 50 por ciento de sus vecinos".

En esta línea, señala que la ciudadanía está "ahora mismo más preocupada de la crisis que de quién va a ser el próximo alcalde, para ver eso hay que esperar aún unos meses", al mismo tiempo que reconoce que "la tendencia lógicamente refleja el desgaste de quien gobierna a todos los niveles".

"Ahora mismo se está valorando la actualidad y el pasado, todavía no se valora la opción política de futuro por la que se decanta el ciudadano", reitera Espadas, quien cree que "los ciudadanos de Sevilla acabarán fijando su atención en cuáles son los proyectos que presentan los candidatos".

"el pp ha tocado techo"

Por otro lado, apunta que "el PP tanto en España como en Andalucía y Sevilla ha tocado techo desde el punto de vista de sus expectativas electorales", porque "tiene una masa de votantes perfectamente definida, pero no les permite lo que ellos siempre quieren, una mayoría absoluta que les deje gobernar sin tener que echar cuenta a nadie, marcando siempre ellos las reglas del juego".

Frente a esto, recuerda que en el PSOE están "acostumbrados a trabajar en otros escenarios" y aclara que "la mayoría de la ciudad sigue estando distribuida entre otras opciones políticas" a las que dice que le "gustaría aglutinar en el proyecto socialista".

En este sentido, hace un llamamiento al "conjunto de personas que no tienen definido su voto en la derecha", para que "entiendan que el voto útil es el voto de progreso, el voto transformador, el voto que sigue empeñado en que la ciudad avance y no se detenga o retroceda, que valore la libertad, la expresión y la creatividad antes que un conservadurismo clásico y en muchos casos rancio que no se adapta a los tiempos que los sevillanos quieren".