Baleares ha experimentado durante el ejercicio de 2010 el segundo mayor descenso en el precio de los pisos de segunda mano, con una disminución del -7,51 por ciento, sólo por detrás de La Rioja (-10,49%) y registrando, de esta forma, una caída mayor que la media española (-4,58%).

Según un informe del portal inmobiliario 'Facilisimo.com', otros descensos que fueron más acusados que el de la media nacional han tenido lugar en Madrid (-6,78 por ciento), Cataluña (-6,21 por ciento) y Navarra (-5,91 por ciento). Las bajadas más moderadas, por contra, se registraron en Castilla-La Mancha (-2,60 por ciento), Canarias (-2,72 por ciento) y Murcia (-2,80 por ciento).

Por su parte, destaca el hecho de que tres comunidades autónomas cierran 2010 con subidas del precio de la vivienda usada. Se trata de Cantabria, con un aumento del 7,31 por ciento; Extremadura (+0,36 por ciento) y Galicia (+0,19 por ciento).

A nivel nacional, el precio de la vivienda de segunda mano registró un descenso medio del 4,58 por ciento, de forma que cerró el año en los 2.043 euros por metro cuadrado, un importe similar al que se registraba a mediados de 2004 y acumulando un ajuste del 19 por ciento desde que a mediados de 2007 estalló la crisis en el sector.

No obstante, el dato de 2010 constata la desaceleración que se registra en el ritmo de descenso de los precios, dado que constituye la menor caída de los tres últimos años, esto es, respecto a la del 6,06 por ciento que se contabilizó en 2009 y a la del 7,62 por ciento de 2008.

Esta moderación del ajuste se evidencia también en la evolución trimestral del precio de los pisos en 2010, dado que mientras que en el primer trimestre descendió un 1,87 por ciento, en el último lo hizo un 0,83 por ciento.

Respecto a 2011, el director general de 'Facilisimo.com', Juan Ramón Doral, considera que "será difícil ver un gran cambio", ya que, en su opinión, "la banca prevé mantener e incluso agudizar, la escasez del crédito".

Para el directivo del portal, 2010 ha sido un año de "incertidumbre, en el que la expectativa de reactivación del mercado inmobiliario se ha visto truncada por el alargamiento de la crisis y el aumento del paro". Además, "la desgravación no ha impulsado la compra y el descenso del precio se está estabilizando".