El alcalde de Vitoria, Patxi Lazcoz, ha precisado que más que criticar la gestión de la crisis que ha hecho el Gobierno Zapatero, simpatiza y empatiza con una sensación "muy generalizada en la calle, que es la relacionada con que los gobiernos democráticos europeos sabemos cuáles son, la cara y los ojos de nuestros gobernantes, como ciudadanos nos podemos dirigir a ellos, criticarlos o respaldarlos según coincidamos o no".

En una entrevista a Radio Euskadi, recogidas por Europa Press, Lazcoz se ha referido así a sus últimas declaraciones en las que calificó de "terrible" la "sumisión" del Ejecutivo central a los especuladores financieros.

El primer edil vitoriano ha insistido en que "aquéllos que han provocado la crisis, que son los especuladores del mundo financiero, y ahora se dedican a presionar a esos gobiernos elegidos democráticamente por los ciudadanos, pues no hay una elecciones en las que los ciudadanos les podamos dar una tremenda lección y decirles que estamos cansados de que todos estos años en los que se han llenado los bolsillos ganando a espuertas dinero y ahora después de haber provocado esta crisis, lo que no puede ser es que seamos los ciudadanos los que paguemos la crisis".

En este sentido, ha manifestado que "se trata de que todos esos derechos que tantos años ha costado conquistar no solamente para el mundo de los trabajadores, sino también para aquéllos que no lo son, no sean los derechos que resulten perjudicados precisamente por la culpa de otros, que no creo que sean los gobiernos que han sido elegidos democráticamente, sino aquéllos que especulan en el ámbito financiero y que ahora tienen las narices de dar lecciones de cómo salir de la crisis".

Preguntado sobre si preferiría a Alfredo Pérez Rubalcaba o a José Luís Rodríguez Zapatero como candidato socialista en las próximas elecciones generales, se ha mostrado convencido de que el PSOE pondrá a la "mejor persona, a aquélla que sea capaz de ganar la confianza de los ciudadanos para seguir manteniendo un gobierno progresista".

En este sentido, se ha mostrado convencido de que si ahora estaría en el poder un gobierno de derechas "estaríamos todos saliendo a la calle a tratar de reivindicar el que no se nos recortasen todavía más derechos".

Por otra parte, ha dicho entender la causa de la huelga general del 27 de enero convocada por los sindicatos abertzales en Euskadi y Navarra y ha mostrado su respeto a lo que "en este caso hacen los representantes sindicales", aunque haya cosas que no pueda "compartir".