Los estudiantes de institutos madrileños acaban este jueves la primera evaluación y, si se cumple la tradición, muchos de ellos acudirán a las plazas del centro de la capital para festejar las vacaciones de Navidad con un botellón. Sin embargo, la Policía Municipal estará esperándoles para evitarlo.

El Ayuntamiento de Madrid ha preparado un dispositivo especial de vigilancia que consistirá en un aumento de agentes en los alrededores de la Plaza Mayor. El despliegue se mantendrá durante toda la mañana, con la intención de "regular el consumo de alcohol en la calle y evitar altercados", según fuentes policiales.

Sin embargo, los agentes aclaran que "esta 'celebración' va por modas, y en los últimos cuatro años se ha diluido". Todos los años se monta el dispositivo, "pero es sólo por precaución, hace ya tiempo que no tenemos que actuar".