Agentes de la Policía Nacional han detenido en Pamplona y su Comarca a cinco personas de nacionalidad colombiana como presuntos autores de un delito contra la salud pública, acusadas de importar cocaína desde Colombia.

Los detenidos son Marta J.G.G, de 29 años, Carlos A.F.M., de 26 años, Adrian T.G., de 28 años, Mauricio R.R., de 27 años y Jorge L.C.F., de 22 años, todos nacidos en Colombia y domiciliados en Pamplona y su Cuenca.

Según ha informado la Policía Nacional en un comunicado, los detenidos formaban parte de una organización dedicada a importar cocaína desde Colombia en paquetes postales, procediendo a la adulteración en laboratorios clandestinos y su posterior distribución a intermediarios de los consumidores últimos.

La investigación que dio como resultado las detenciones se inició a raíz del desmantelamiento de otro laboratorio clandestino de similares características hace escasas semanas en Burlada, lugar donde fueron incautados dos kilogramos de cocaína, sustancia de corte y objetos para la adulteración de droga.

Siguiendo esta vía de investigación se detectó una vivienda en la calle Errotazar que podía estar siendo utilizada como laboratorio clandestino de adulteración de droga. Al lugar acudían personas de origen colombiano y permanecía allí por largos espacios de tiempo, "siendo extremadamente cuidadosos a la hora de no levantar sospechas entre vecinos y personas del inmueble, ocultando con ello su actividad criminal", según la Policía Nacional.

La organización actuaba con enlaces residentes en su país de origen que les enviaban la cocaína oculta por diferentes medios. De hecho, gracias a la colaboración de la Policía Colombiana, pudo intervenirse antes de que fuese enviado a España un paquete postal que contenía más de medio kilo de hojas de papel impregnadas en cocaína.

Una vez en España, los soportes impregnados en la droga eran recibidos por la organización que la transformaba mediante procedimientos químicos en pasta de cocaína, que posteriormente era procesada en el laboratorio en cocaína apta para el consumo.

Finalmente, solo quedaba ser adulterada con diferentes productos, que fueron igualmente intervenidos, para multiplicar la cantidad de producto y con ello las ganancias.

La Policía Nacional practicó tres registros domiciliarios, incautándose en uno de ellos decenas de útiles y productos químicos para la adulteración de droga.

Igualmente se encontraron útiles para el pesaje de droga y bolsas de material plástico para distribuir las partidas de la cocaína entre sus compradores. Los agentes se incautaron también de una máquina termo selladora, balanzas electrónicas de precisión y dos mecanismos hidráulicos que eran utilizados para prensar la droga adulterada.

En otra de las viviendas se aprehendieron diferentes cantidades de cocaína, balanzas electrónicas, varios ordenadores portátiles, más de 9.000 euros, así como otros bienes procedentes de las ganancias del tráfico de drogas.

Los detenidos, que carecían de antecedentes policiales, fueron puestos a disposición de la autoridad judicial junto al atestado policial instruido, decretándose el ingreso en prisión de todos ellos.