La Guardia Civil de Ciudad Real, en el marco de la denominada Operación 'SANKO', ha detenido a 16 personas por los supuestos delitos de robo con fuerza en las cosas, receptación y asociación ilícita, a los que se les imputan mas de 20 hechos delictivos cometidos en la provincia de Ciudad Real sobre las líneas de tendido telefónico, provocando daños valorados en 340.000 euros

Las investigaciones se iniciaron a mediados del mes de mayo del año en curso tras tener lugar, en la localidad de Porzuna, diferentes robos con fuerza en las cosas en los cuales sus autores, tras sustraer el cable de hilo telefónico, dejaron incomunicadas a varias localidades de la zona, creando gran alarma social, ha informado la Subdelegación del Gobierno de Ciudad Real.

Desarrollo de las investigaciones

El grupo de delincuentes investigado estaba perfectamente estructurado y jerarquizado, y se ha conseguido demostrar que poseían una amplia preparación a la hora de cometer los robos y que contaban con herramientas adecuadas para ello.

Dichos robos, según la Subdelegación del Gobierno, eran cometidos con un mismo patrón de actuación o 'modus operandi', cuya preparación y ejecución permitió afirmar que respondían a la actividad criminal desarrollada por un grupo organizado.

Así, una vez reconocida la zona en la que iban a robar, se desplazaban a la misma utilizando para ello varios vehículos. Simultáneamente, actuaban, de forma organizada, en pequeñas células de cuatro o cinco componentes sobre varias zonas, lo cual dificultaba la acción policial preventiva al activarse las alarmas de corte telefónico a la vez, llegando incluso a serrar los postes de madera donde se apoya el cable telefónico al objeto de sustraerlo.

Previamente al inicio de los robos, colocaban en los caminos de acceso al lugar de acción a integrantes del grupo con la misión de vigilar y avisar en caso de percatarse de posible presencia policial y abortar rápidamente la actividad ilícita.

Total impunidad

De esta forma, actuaban con total impunidad, pudiendo utilizar medios autónomos de iluminación como linternas o focos y herramientas como radiales, motosierras para ayudarse durante la comisión del robo. De igual forma, al tener reconocida perfectamente la zona, siempre tenían preparada la posible vía de huída.

Asimismo, según la Subdelegación, no dudaban en utilizar sistemas para ocultar las matrículas de los vehículos y evitar, de esta forma, su posible identificación. Además, en todo momento, vestían ropas oscuras y utilizaban pasamontañas para ocultar sus caras y guantes al objeto de no dejar prueba alguna.

Del mismo modo, una vez finalizados los robos programados en la zona de actuación, todos los efectos robados eran introducidos en uno de los vehículos que se desplazaba utilizando sólo caminos, evitando circular por carreteras y contando con el apoyo de un vehículo lanzadera.

Igualmente, durante el curso de las investigaciones, en varias actuaciones realizadas, se recuperó un total de 8.000 kilogramos de cable de cobre de tendido telefónico.

Fase de explotación

Una vez obtenidas las pruebas incriminatorias suficientes, se detuvo, de forma progresiva, a los integrantes de los diferentes grupos delictivos investigados con el siguiente resultado: En primer lugar, se desarticuló el grupo operativo, deteniendo a 12 personas entre las localidades de Ciudad Real y Porzuna, efectuándose cuatro entradas y registros en domicilios y locales utilizados por la organización para ocultar los efectos procedentes de sus actividades delictivas, recuperándose 2.500 kilogramos de cable de cobre de tendido telefónico.

A continuación, se detuvo a los integrantes del grupo encargados de la receptación del cobre sustraído, tres personas entre las localidades de Ciudad Real y Porzuna. Se inspeccionó también una chatarrería en la localidad de Yuncler de la Sagra (Toledo), donde se recuperaron 10.376 kilogramos de cobre, deteniéndose al titular de la misma.

Además, la explotación de la operación ha permitido la plena desarticulación de un grupo organizado al que se le imputa, por el momento, un total de 20 robos con fuerza en las cosas, perpetrados en la provincia de Ciudad Real y con los cuales han obtenido, durante el año 2010, más de un millón de euros de beneficios con las actividades ilícitas desarrolladas, provocando daños por 340.000 euros y a los que se les han aprehendido objetos valorados en mas de 130.000 euros.

Los hechos delictivos cometidos por la red investigada se han desarrollado en la provincia de Ciudad Real en localidades como Porzuna, Malagón, Fuente El Fresno, Los Cortijos, Horcajo de los Montes, Villarrubia de los Ojos, Corral de Calatrava, Pozuelo de Calatrava, Alcoba de los Montes, Piedrabuena y Abenojar.

Detenidos y efectos recuperados

Los detenidos, un total de 16, han sido J.S.S. de 43 años de edad, S.B.S. de 25 años de edad, S.C.M. de 32 años de edad y B.S.S. de 38 años de edad, todos ellos vecinos de Ciudad Real. A ellos se suma F.O.N. de 51 años de edad y vecino de Talavera de la Reina (Toledo).

Asimismo, se ha arrestado a G.M.P. de 25 años de edad; K.Z. de 36 años de edad; J.S.S. de 36 años de edad; F.G.S.S. de 50 años de edad; I.S.S. de 45 años de edad; B.S.F. de 70 años de edad; M.A.C.N. de 42 años de edad; M.C.G. de 42 años de edad; E.C.R. de 19 años de edad; S.C.R. de 17 años de edad y F.S.R. de 38 años de edad, todos ellos vecinos de Porzuna (Ciudad Real).

Los objetos recuperados han sido 20.876 kilogramos de cable, ascendiendo un valor en el mercado de 125.256 euros, y herramientas —palanquetas, gatos hidráulicos, alicates, tenazas, cizallas, motosierras, o grupos electrógenos— utilizados por los detenidos para la comisión de sus ilícitos.

Las presentes investigaciones han sido dirigidas por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de los de Ciudad Real, y las mismas continúan abiertas y no se descartan nuevas detenciones.