La conselleira de Traballo e Benestar, Beatriz Mato, ha defendido el reparto de los fondos para los talleres de empleo efectuado por la Xunta, alegando que se ajusta a los criterios de una orden que es "la misma desde hace 12 años" y que también aplicó el dirigente socialista y ex conselleiro de Traballo, Ricardo Varela.

"Estos proyectos no se refieren a partidos políticos, ayuntamientos o alcaldes, sino a los desempleados", proclamó Mato en respuesta al diputado socialista José Tomé Roca, quien la interpeló en la Cámara gallega tras denunciar que "la práctica totalidad de los fondos" destinados a talleres de empleo en el segundo semestre de 2010 se repartieron "entre los municipios en los que gobierna el PP".

Frente a ello, la conselleira explicó que su departamento recibió un total de 136 solicitudes de ayuntamientos —del total de 160 peticiones que entraron, puesto que pueden concurrir otras entidades— y aseguró que "algunos" de estos municipios "se quedaron fuera" porque no aportaron "toda la documentación" requerida.

A continuación, subrayó que el reparto se efectuó en base a varios criterios y no sólo el que se refiere al número de parados. "Si esto fuera así todos los talleres serían para los mismos ayuntamientos", argumentó, antes de añadir que se tuvieron en cuenta otros aspectos como, por ejemplo, el "carácter innovador" de los proyectos presentados.

En cualquier caso, advirtió de que ningún criterio hacer referencia "a partidos políticos" como tampoco se establece "un número límite" de talleres de empleo "en función del partido que Gobierno". "Los únicos criterios que utilizamos fueron los determinados por la orden, como seguro que hizo también el anterior conselleiro", zanjó Mato. "TROPELÍA,

Abuso y favoritismo"

"Puede decir lo que quiera, pero hay ayuntamientos del PSOE que teniendo más puntuación no tienen un taller de empleo y otros del PP que teniendo menos, sí", replicó Tomé Roca e hizo hincapié en que las localidades más pobladas —y con mayor número de parados— no han accedido a los fondos para este tipo de iniciativas, extremo que atribuyó a que la Xunta "no puede comprar voluntades en las grandes villas y ciudades". "Por eso no gobiernan en ellas", apostilló.

Así las cosas, el parlamentario socialista tiró de "diccionario" y acusó a la Xunta de haber caído en la "tropelía, arbitrariedad, abuso, amiguismo y favoritismo, entre otros" al acometer el reparto de estos fondos. También cargó contra la gestión de la conselleira, señalando que hay "más parados que cuando llegó" por lo que interpretó que el actual Gobierno gallego es "la mayor trampa política" que sufrió la comunidad "en 30 años". "Olvídese del sectarismo", instó.

En la línea, el diputado Henrique Viéitez incidió en que la Xunta "sí varió el peso de los criterios" y denunció la "patrimonialización" de los recursos de la Administración autonómica "al servicio del PP".

"No aplican los criterios como se debe y volvemos a las prácticas clientelares que deberían estar desterradas hace mucho tiempo", aseguró el parlamentario nacionalista, quien instó al Ejecutivo autonómico a erradicarlas.

"olor electoralista"

Beatriz Mato defendió que "no se trata de decir sí a todas las ofertas" e insistió en la "obediencia" de la Xunta a la orden que regula el reparto de estos fondos, punto en el que coincidió con el diputado popular Alberto Sueiro Pastoriza. "Los talleres son para los desempleados, no para los ayuntamientos ni, por supuesto, para los partidos", refrendó el parlamentario.

Al tiempo, insistió en que éste es un debate "recurrente" y lo vinculó con la proximidad de las elecciones municipales de 2011. "Hay un fuerte olor electoralista", constató.

Familias monoparentales en lugo

Por otra parte, la conselleira de Traballo aseguró, en respuesta al nacionalista Fernando Blanco, que la Xunta "no ha recibido comunicación" sobre el cierre del centro de ayuda a familias monoparentales lucense ni en relación con la "renovación" del convenio con financiación para este centro, gestionado por la Asociación de Mulleres Separadas e Divorciadas de Lugo.

"Si la asociación no quiere dar el servicio, quien tendrá que hacer algo es la Consellería", replicó el parlamentario nacionalista, quien dio por "enterada" a Mato "a través del sector o de la prensa" e insistió en que la Xunta debe "actuar".