El alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, ha afirmado, durante la inauguración de la parte renovada de la Plaza de Abastos, que el de La Ribera es un mercado "ejemplar, limpio y sostenible" y que, cuando concluya la segunda fase, se habrá conseguido un "mercado modélico, eficaz y competitivo".

En su discurso ha dicho que se llega "al final de la primera etapa con la inauguración de una gran parte del mercado", de una plaza de abastos cuya gestión fue concedida a los propios comerciantes, aunque tuvo que se rescatada desde el Ayuntamiento "ante su inoperancia".

Según ha indicado, gracias al actual arquitecto encargado del proyecto de reforma, Emilio Puertas, se solicitó a Labein-Tecnalia un estudio de la situación estructural del mercado, un informe que fue "demoledor" e hizo cambiar los planes del Consistorio y decidirse por el recate.

El primer edil ha afirmado que estos planes fueron "absolutamente incomprendidos por algunos puristas que rozan el inmovilismo y la intolerancia y que incluso nos ha costado llegar a los tribunales", como sucedió en el caso de algunos comerciantes que entendían que la concesión de sus puestos duraba 99 años, mientras el Ayuntamiento defendía que expiraba en 2005.

"Nos han hecho mucho daño, pero estamos en la inauguración, porque nuestra primera pretensión fue la seguridad del mercado, además de su transformación", ha dicho.

El primer edil ha agradecido también, durante su discurso, la ayuda económica del Gobierno vasco, "el de antes y el de ahora", y ha afirmado que ahora le toca al concejal de Salud y Consumo, Sabin Anuzita, y a su equipo "gestionar el mercado con mano firme".

Según ha dicho, es un "mercado ejemplar, limpio y sostenible", un mercado en el que todos los bilbaínos han invertido "mucho dinero", financiación sin la cual "el mercado hubiera estado abocado al cierre irremisible".

Ha afirmado también que "un reglamento y mucha seriedad por parte del Departamento de Salud hará que se pueda terminar la segunda fase "con la garantía de haber conseguido un mercado modélico, eficaz y competitivo y no un lugar sin orden ni concierto".

Durante su disertación ha agradecido la posición de la mayoría de los comerciantes "que han apostado por el mercado", así como la de "todos los que lo visitan, compran y consumen", al tiempo que ha asegurado que "otros comerciantes se han dedicado a ponernos palos en las ruedas".

La parte ya renovada e inaugurada este martes es la cercana al puente de San Antón, así como la parte central del edificio. Los trabajos se están realizando en dos partes para lograr mantener en todo momento la actividad de los comerciantes en el mercado.

Las obras inauguradas este martes se han realizado en 14 meses y en ellas se han invertido un total de 9.200.000 euros. El Ayuntamiento de Bilbao ha mejorado completamente el estado del Mercado y ha garantizado la accesibilidad de este característico inmueble con nuevos elementos mecánicos que conectan las distintas plantas del mercado.

Mejoras en la estética

Además, se ha mejorado la estética de los puestos y se han incluido importantes novedades para el bienestar y la comodidad de los comerciantes, como son el suelo térmico en los puestos, que les aislará del frío en invierno, la construcción de los puestos con materiales fácilmente lavables y duraderos, la iluminación específica para cada tipo de producto.

El mercado nuevo cuenta con tres plantas: dos plantas comerciales y una planta sótano que está dedicada a entrada y salida de mercancías, instalaciones y servicios complementarios. Los comerciantes se ubican en las dos plantas altas. Por el momento, 49 de ellos en la zona de San Antón y 10 en la zona central.

Las entradas a la superficie de venta se ubican en la Calle Ribera y en San Antón. La carga y descarga de mercancías se realizará a través de la planta de sótano, mediante montacargas específicos, lo cual permitirá que, tanto los vehículos en el exterior como el tránsito de mercancías interior , no suponga una molestia para los clientes, vecinos y visitantes

El Ayuntamiento ha querido ser fiel con el proyecto original. De esta manera, se ha reconstruido el Mercado sin el ábside cercano a la Iglesia de San Antón, tal y como se contemplaba en el proyecto original que hizo Pedro Ispizua, el arquitecto que diseñó el edificio, en el año 1927.

Gracias a la no reconstrucción del ábside se ha logrado ganar un nuevo espacio público de estancia de 1.700 metros cuadrados para los vecinos del Casco Viejo y de Bilbao, entre la iglesia de san Antón y el Mercado de la Ribera.

Obras de la otra mitad del mercado

El Ayuntamiento comenzará en el mes de abril con las obras de la mitad del mercado próxima al puente de La Merced. Se prevé que estas obras duren 12 meses.

Mientras tanto, los 60 puestos de comerciantes del mercado estarán ubicados en el ala renovada. Su ubicación se distribuirá de la siguiente manera: 50 puestos permanecerán ya, de manera definitiva en el ala de San Antón. Los 10 puestos restantes se ubicarán de forma provisional en la parte central del edificio, y cuando finalicen las obras de la nueva zona serán reubicados en este nuevo espacio.