Endesa ha formalizado la venta a Red Eléctrica de España de activos de transporte de energía eléctrica por importe de 1.412 millones de euros, informó hoy REE a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

En concreto, el precio de los activos en servicio objeto de la compraventa asciende a 1.269,8 millones de euros, mientras que el de los activos en fase de construcción es de 142,2 millones.

La operación incluye los activos en servicio que otorgan derecho a retribución en 2010 en concepto de transporte de electricidad, así como los que se están construyendo para su puesta en servicio este año, y cuya retribución empezará a percibirse en 2011.

Ambas empresas habían suscrito el pasado 1 de julio el contrato de compraventa de estos activos de transporte, dando con ello cumplimiento a la obligación impuesta por la normativa que modificaba la Ley del Sector Eléctrico.

El contrato de compraventa viene acompañado de un acuerdo de disponibilidad de asistencia técnica por un plazo de cuatro años y un valor de 66 millones de euros.

Por ello, la empresa que preside Luis Atienza y Endesa Distribución colaborarán entre sí, cada una de ellas dentro de su ámbito de actuación, durante un periodo transitorio "prudencial" para la adecuada prestación del servicio eléctrico, al objeto de optimizar la aplicación del nuevo marco normativo, según indicó REE a la CNMV.

Con esta desinversión, Endesa cumple con los compromisos de reducción de deuda del grupo Enel, fijados en 45.000 millones al final de 2010 y en 34.000 millones de euros al final del 2014.

Endesa y REE debían cerrar antes del 7 de julio este acuerdo de compraventa para cumplir las exigencias regulatorias o, de lo contrario, recurrir a un árbitro. En concreto, la ley 17/2007 obliga a las empresas distribuidoras a vender sus redes e instalaciones de transporte de electricidad a REE, a la que se designa legalmente como transportista único.

Islas y península.

El acuerdo, aprobado por los consejos de administración de Endesa y REE, afecta a redes de transporte de energía eléctrica insulares y peninsulares. En Canarias y Baleares, afecta a las líneas con tensiones de 66 kilovoltios (kV), 132 kV y 220 kV, mientras que en la Península se circunscribe a los activos de 220 kV.

Para REE, la operación formalizada hoy supone la consolidación definitiva del modelo de transportista único y operador del sistema eléctrico, en el que España ha sido "pionera en el mundo".