Una de cada cuatro mujeres ha sufrido a lo largo de su vida una agresión de género grave en Catalunya, según ha revelado la primera encuesta sobre violencia machista que ha elaborado el Departamento de Interior de la Generalitat.

El estudio, en el que han participado 14.122 mujeres y 1.501 hombres, advierte asimismo de que más del 80% de las víctimas de algún comportamiento delictivo en el ámbito de la violencia de género no denuncia la agresión, y que cerca de 70.000 catalanas se han considerado maltratadas durante el último año.

El sociólogo Josu Gondra ha indicado que las ex parejas son uno de los grupos que con más frecuencia incurre en comportamientos agresivos, y también aquellos agresores a quienes las mujeres están más dispuestas a denunciar. Por el contrario, la pareja con la que se convive y los familiares cercanos son en ocasiones maltratadores a quienes la víctima oculta por "miedo o vergüenza".

Gondra ha insistido en que el alto porcentaje de mujeres que no han querido identificar al hombre que las ha agredido podría estar silenciando un amplio volumen de ataques machistas por parte de familiares muy cercanos. En cuanto al ambiente laboral -uno de los ámbitos que más impacta psicológicamente a las víctimas, junto a la pareja-, la encuesta concluye que alrededor del 4% de las mujeres están "claramente discriminadas" por razón de sexo.

Esta cifra incluye a las mujeres que soportan actitudes como críticas maliciosas en su lugar de trabajo, encargos inadecuados, desprecio o burlas personales y maniobras intencionadas para que no puedan desarrollar su labor de forma adecuada.

En menos casos, pero también en un porcentaje destacable, la encuesta pone de manifiesto que se producen amenazas por no avenirse a requerimientos sexuales de jefes u otros empleados -el 0,2% de las encuestadas lo ha sufrido- o insinuaciones de que se lograrán mejoras laborales a cambio de favores sexuales -como han asegurado el 0,3% de las mujeres-.