Los puertos de Marín (Pontevedra) y Ribadeo (Lugo) han movido cerca de 650.000 toneladas de celulosa producidas por Ence en sus fábricas de Pontevedra y Navia en los 11 primeros meses de este año, según datos de la empresa.

Según el director de Logística de la unidad de Celulosa de Ence, Ignacio Gómez, la compañía exporta aproximadamente el 90 por ciento de su producción de este producto, principalmente con destino a los puertos de Amsterdam (Holanda), Livorno (Italia), Szcecin (Polonia) y Brake (Alemania).

Ence afirma que sus operaciones logísticas han generado en Galicia cerca de 3,6 millones de euros en lo que va de año, entre servicios de transporte, trabajos de carga y descarga y tasas y servicios portuarios, así como que la empresa genera casi 7.500 puestos de trabajo en Galicia y Asturias entre puestos directos, indirectos e inducidos.

La empresa ha firmado un acuerdo con la Xunta de Galicia para continuar empleando el puerto de Ribadeo y, al mismo tiempo, ha realizado otro con Feve y el principado de Asturias para exportar también a través del puerto gijonés de El Musel. Las obras de construcción para las infraestructuras necesarias ya están en marcha.

Pasta de eucalito

Lo que sale de las fábricas de Ence son láminas de pasta de celulosa, devuelta a ese estado para trabajar con ella. Una buena parte de la pasta es de eucalipto, pues, sostiene el director de Sostenibilidad de Ence, Luis Javier Sánchez, este árbol "tiene un alto contenido en celulosa, y crece mucho más rápido que otros".

Sin embargo, Sánchez afirma que existe alrededor de este árbol una "leyenda negra". El director de Sostenibilidad afirma que su cultivo tiene un impacto ambiental "mucho menor" que el de el maíz o la patata, y comparado con otros árboles, presenta un consumo de agua y una capacidad para reproducirse "similar" a la de otras especies "como el castaño y el roble".

Retos del forestal gallego

Sánchez asevera también que uno de los grandes retos del sector forestal gallego pasa por garantizar la sostenibilidad de la producción. Afirma que "Se trata de garantizar un crecimiento económico respetuoso con la biodiversidad" que permita "asegurar el futuro". Asimismo, dice que "hoy existen procedimientos de certificación" destinados a asegurar la "sostenibilidad" en la producción de madera.

Como ejemplo, Ence afirma que satisface las necesidades energéticas de sus fábricas en Pontevedra y Navia con biomasa residual y las cortezas de los eucaliptos que son procesados en las factorías.