El RACC ha alertado de que un total de 114 jóvenes fallecieron en accidentes de tráfico en la Comunidad Autónoma durante 2009, según se desprende del informe elaborado por esta entidad denominado 'Jóvenes y conducción. Un derecho y una responsabilidad', que cubre el periodo 2000-2009, lo que permite tener una visión a largo plazo sobre la evolución de la siniestralidad vial de los jóvenes en la región.

Según el documento, otros 838 resultaron heridos graves y 6.949 heridos leves, cifras que, en años anteriores, fueron "todavía más elevadas". Así, entre 2000 y 2008, la media anual de jóvenes muertos en carretera fue de 228, la de heridos graves de 1.765, y la de heridos leves de 8.450.

Durante esos años los jóvenes representaron el 34,6 por ciento del total de fallecidos en accidente de tráfico en Andalucía y en torno al 42,6 por ciento del total de heridos graves y leves, según han señalado durante la presentación del informe que ha tenido lugar este miércoles en la capital malagueña.

Asimismo, han explicado que la tasa de riesgo, que mide el número de muertos en accidente de tráfico por cada 100.000 habitantes, tanto de los jóvenes como del conjunto de la población, ha caído de forma "significativa" en el periodo 2000-2009. De este modo, la de los jóvenes ha pasado de una media de 12,9 en el periodo 2000-2008 a 6,7 en 2009, mientras que la del conjunto de la población ha descendido también de 8,4 a 4,7 durante esos años.

No obstante, a pesar de este descenso, la tasa de riesgo de los jóvenes ha seguido siendo superior a la del conjunto de la población andaluza, pues en 2009 la probabilidad de que un joven andaluz muriese en accidente de tráfico era el 42 por ciento más alta que la que tenía el promedio de la población andaluza.

Tipología de accidentes

De los 114 jóvenes muertos en accidente de tráfico en Andalucía en 2009, 63 iban en turismo, 21 en motocicleta, 17 en ciclomotor y 13 en otros medios de transporte, según apunta el documento, el cual señala que los jóvenes muertos que iban en turismo y en ciclomotor ha descendido un 54 por ciento y un 51 por ciento, respectivamente.

Por el contrario, los que iban en motocicleta han disminuido "mucho menos", alcanzando sólo un 30 por ciento, por lo que "la accidentalidad de motocicletas tiene un amplio margen de mejora en Andalucía", han destacado.

De las infracciones analizadas, se observa que las distracciones y, especialmente, el exceso de velocidad, están principalmente relacionadas con los accidentes de los jóvenes. De este modo, "resulta significativo que durante el periodo 2000-2008, prácticamente el 50 por ciento de las infracciones relacionadas con la velocidad implicasen a conductores jóvenes".

En este sentido, han incidido en la importancia de trabajar "especialmente" en campañas de sensibilización dirigidas a los jóvenes, concienciándolos en el riesgo de la velocidad excesiva y de las distracciones en la conducción.

Entre 2000 y 2009 la mortalidad por accidente de tráfico en carretera cayó un 53,6 por ciento en España y un 46,3 por ciento en Andalucía. En cambio, el número de jóvenes muertos en las carreteras descendió un 64,6 por ciento a nivel nacional y un 56,5 por ciento en la región.

Accesorios de seguridad

A pesar de que el uso de los accesorios de seguridad por los ciudadanos ha aumentado, aún hay que trabajar en esta materia, según han indicado, pues, tal y como han explicado, el uso del cinturón de seguridad se situó en niveles por encima del 90 por ciento en el año 2009, casi 11 puntos por encima del promedio registrado en años anteriores.

En el caso del uso del casco en los ciclomotores ha habido también una mejora "muy importante", ya que entre los jóvenes el uso del mismo ha pasado del 62,3 por ciento al 91,7 por ciento, los que significa que aún hay un 8,3 por ciento de los jóvenes y un 7,5 por ciento del resto de conductores que siguen sin utilizar este elemento "vital" como es el casco.

Desde RACC han indicado que es necesario llevar a cabo una serie de medidas que propicien un cambio de actitud y aptitud en el conductor pues, tal y como han destacado, éstas son las principales causas que provocan los accidentes de tráfico de los jóvenes.

También han abogado por poner en marcha campañas de información, formación y educación, así como mejorar el transporte público y reforzar las pruebas de obtención del permiso de conducir. Además, apuestan por la figura del conductor alternativo o la conducción acompañada.