El presidente de Pimem, Joan Cabrera, ha tachado de "cortina de humo" las nuevas rebajas fiscales anunciadas esta mañana por el presidente del Gobierno central, José Luis Rodríguez Zapatero, al considerar que no supondrán una "mejora" para este sector, ya que, según ha advertido, estas medidas no impedirán que se sigan cerrando empresas en 2011, "año que se avecina bastante difícil y en el que no se ven ni las raíces de los brotes verdes".

En declaraciones a Europa Press, Cabrera ha valorado así la medida adelantada por Zapatero, que contempla un cambio en el primer tramo del Impuesto de Sociedades que tributa al tipo reducido, establecido actualmente en el 25 por ciento, que pasará de 120.000 a 300.000 euros.

Para Cabrera, lo que debería hacer el Ejecutivo es establecer el tipo reducido en un 10 o un 15 por ciento, con el fin de que suponga una "mejora" para las Pymes, al tiempo que ha subrayado que el hecho de que se amplíe hasta 300.000 euros "no beneficia" a este sector, teniendo en cuenta que en la actual crisis económica son muy pocas las pequeñas y medianas empresas que obtienen estos beneficios.

"Estas medidas servirán para acallar a no sé quién, porque las Pymes seguirán sufriendo las mismas dificultades", ha recalcado, al tiempo que ha considerado que la eliminación de la ayuda a los parados de 426 euros debería ir unida a la subvención, por parte del Gobierno, del 50 por ciento del coste de los contratos que realicen las pequeñas y medianas empresas, con el fin de fomentar el empleo.

En esta línea, ha manifestado que una gran parte de las personas que reciben los 426 euros, deben trabajar en la economía sumergida, algo que "perjudica al tejido empresarial". Por ello, ha indicado en que si además de eliminar esta ayuda, el Ejecutivo asume el 50 por ciento del coste que supone contratar a una persona, la empresa cotizará el cien por cien, por lo que este dinero "se reinvertirá en las arcas del Estado".

"El Gobierno elimina estas ayudas, porque se ha dado cuenta de que, con el tiempo, este dinero no ha servido absolutamente para nada, mientras que si hubiera tomado medidas de acercamiento a las Pymes que, en estos momentos, no pueden aumentar su plantilla, hubiese ayudado a que hoy hubiera más puestos de trabajo", ha sostenido Cabrera.

Por otra parte, ha censurado que las administraciones públicas tardan entre ocho y doce meses en pagar las facturas pendientes a las Pymes que han realizado trabajos para estas instituciones, situación que la calificado de "insostenible" para muchas empresas, al tiempo que ha subrayado que supone un "incumplimiento" de la Ley de Morosidad aprobada en el Parlament.

Pese a que ha reconocido que es "muy difícil" cuantificar cuánto dinero deben las instituciones públicas a las Pymes, dado que habría que analizar empresa por empresa, ha destacado que las ayudas que han recibido los Ayuntamientos para el Plan e ha provocado que estas administraciones estén "más endeudadas que antes", lo que dificulta el pago de las facturas a sus proveedores.

"EN 2011

Cerrarán muchas empresas"

"Vemos que en el primer trimestre de 2011 cerrarán muchísimas empresas en las islas", ha advertido el presidente de Pimem, quien ha criticado que al retraso en el pago de las facturas, se suma una temporada turística que "no ha sido buena", mientras que, por su parte, las entidades financieras no concedan créditos, al tiempo que "no han llegado los créditos para las Pymes en el marco del Plan ICO".

Cabrera ha señalado que en los últimos meses, ha habido "muy pocas" aperturas de nuevas Pymes, mientras que, por el contrario, "cada día se cierran empresas relacionadas con el comercio y los servicios".

Ante tal escenario, ha reprobado la actitud tanto de Zapatero, como del presidente del PP, Mariano Rajoy, ya que cuando hacen campaña "de promoción se les llena la boca de que las Pymes son las que están sufriendo más la crisis" y, sin embargo, nunca se reúnen con este sector para conocer su problemática y ofrecerle soluciones.

Así, ha criticado que Rajoy sólo se ha reunido con los autónomos y no con las Pymes, mientras que Zapatero mantuvo la semana pasada un encuentro con los 37 empresarios más emblemáticos del país, mientras que no recibió a las pequeñas y medianas empresas, a pesar de que "representan el 85 por ciento del tejido empresarial y de los trabajadores".

"Zapatero se reunió con los señores que no tienen ningún tipo de problema con la crisis y que cuando tienen que hace Expedientes de Regulación de Empleo echan a miles de trabajadores", ha zanjado el presidente de Pimem.