Casi no llegan al torno del metro ni a la canceladora del autobús, pero pagan su billetes como si fueran adultos hechos y derechos. O al menos lo hacen al mismo precio que ellos. Y es que los niños de la región no tienen tanta suerte como los pequeños que viven en Figueres, Lleida, Girona y Gijón. Mientras en estas ciudades los chavales viajan gratis en transporte público hasta los 12 años o, incluso, hasta los 16 en dos de ellas, en la región abonan religiosamente su billete a partir de los cuatro.
Este desequilibrio ha llevado a una plataforma ciudadana a exigir al Consorcio Regional de Transportes que rebaje las tarifas para los más pequeños e instaurar un Metrobús infantil gratuito hasta los 12 años y un billete 'mini' hasta los 18. "No es sólo por una cuestión de dinero, sino para acostumbrar a los niños a usar el transporte público. Una apuesta por el medio ambiente", explican los artífices de la campaña, que ya tiene 223 seguidores en su perfil de Facebook.
Los turistas pagan menos
Lo curioso es que mientras los niños de 4 a 11 años que vienen de visita a Madrid sí tienen una reducción del 50% en su billete turístico, los que residen a diario no gozan de ningún descuento y tienen que pagarlo a su precio: 1 euro.
Algo que ya no ocurre en Barcelona. Allí los pequeños pagaban también su tique a partir de los cuatro años como en Madrid, pero desde septiembre los críos de entre 4 y 12 años disponen de una tarjeta que por 35 euros anuales les franquea la entrada al transporte público, según recuerda la plataforma, a la que se han sumado ya la Federación de Asociaciones de Vecinos, la Fapa Giner de los Ríos y el Foro por la Movilidad.
En el resto de Europa las tarifas son especialmente favorables para los niños en Estocolmo, donde hay una reducción del 40 al 55% para los menores de 20. Lo mismo que en Lisboa. En Londres viajan gratis los menores de 11, y en Viena, Munich y Ginebra lo hacen hasta los seis.
Ellos siempre pagan sus billetes
5 preguntas a José Manuel Pradillo
Gerente del Consorcio regional de transportes
Todo es posible. No es descabellado, pero el problema es a quiénes rebajamos el billete, cuánto y quién lo paga.
¿Pero otras ciudades lo hacen?
Sí, pero a costa de encarecer otros títulos de transporte. En esas ciudades el sencillo cuesta bastante más que aquí.
Aún así pagamos el transporte a precio de oro.
Mantener la red de transporte en la región cuesta 2.300 millones. Con los 900 millones que ingresamos en tarifas se cubre sólo el 38%.
¿Serviría rebajar la calidad?
La calidad no se baja, el usuario no lo perdonaría. Es mejor subir las tarifas aunque sea impopular.
¿Es posible el gratis total?
Se ha intentado en Italia y ha fracasado. La gente se acomoda y ya no va andando donde antes sí.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios