Andalucía, Extremadura y Murcia son las comunidades autónomas que concentran un mayor número de trabajadores temporales, con tasas superiores al 30 por ciento, mientras que Cataluña, Madrid y La Rioja presentan las cifras más bajas, por debajo del 20 por ciento, según ha afirmado UGT en un informe.

Del mismo informe se desprende que acorde con la evolución del empleo en todo el territorio nacional, la tasa de temporalidad se redujo en todas las comunidades hasta el inicio de 2010.

En el mismo texto, el sindicato ha denunciado que desde que el Gobierno empezó a adoptar medidas "unilaterales" en el mercado laboral, como la reciente reforma del mercado de trabajo, ha empeorado la calidad del empleo en España. Así se aprecia, por ejemplo, en el colectivo de los jóvenes. De cada 100 asalariados menores de 20 años, 79 son temporales, proporción que ha crecido más de cinco puntos respecto a 2009.

La temporalidad en España también ha repuntado entre los jóvenes de 20 a 24 años, pasando su tasa del 53 por ciento en 2009 hasta el 55,5 por ciento en la actualidad. En el resto de grupos de edad, la tasa de temporalidad ha experimentado un ligero descenso este año respecto al año pasado.

Además, mientras que en el primer trimestre del año, el número de trabajadores temporales logró bajar hasta los 3,7 millones, con una tasa del 24,4 por ciento, en el segundo y tercer trimestre se ha producido una progresiva recuperación del empleo temporal.

De esta forma, se ha incrementado tanto el volumen de asalariados temporales, que ya alcanza los 3,95 millones, como la tasa de temporalidad, que se ha situado en el 25,6 por ciento.

Se amplía la brecha entre sector público y privado

El estudio se centra en España y constata que la temporalidad ha aumentado entre los hombres y las mujeres, con tasas del 24,5 por ciento y del 26,7 por ciento, respectivamente, y que sigue siendo mayor en el sector privado (25,2 por ciento) que en el público (23,9 por ciento). No obstante, este año ha aumentado la brecha entre ambas, pasando de 0,4 puntos a 1,3 puntos.

Según UGT, las tasas de temporalidad más elevadas corresponden actualmente a la agricultura y la construcción, con porcentajes del 55,4 por ciento y del 42,3 por ciento, respectivamente, mientras que las más bajas continúan concentrándose en las actividades financieras y de seguros (6,1 por ciento). En el tercer trimestre de 2010, la temporalidad ha ido al alza en gran parte de los sectores económicos, salvo los ligados a la estacionalidad.

Un tercio de los temporales,

Contratado menos de seis meses.

El estudio del sindicato de Cándido Méndez revela además que cerca de un 14 por ciento de asalariados temporales ha tenido este año un contrato de duración superior a un año, mientras que para el 3,6 por ciento la duración sobrepasa los tres años, para más del 32 por ciento es inferior a seis meses.

Entre los asalariados que llevan en la misma empresa menos de un año, dominan los contratos temporales. A partir de ese límite de tiempo, la proporción se invierte y son los indefinidos los que presentan un mayor porcentaje.

UGT resalta además que el 5,3 por ciento de los asalariados que lleva en el mismo empleo más de seis años aún tiene una relación laboral de carácter temporal con la empresa. Esta cifra sube hasta el 16,6 por ciento para los trabajadores que no han cambiado de empleo en un plazo de tres a seis años, y se sitúa en el 28,2 por ciento para los de entre dos y tres años.

El sindicato viene denunciando desde hace meses que el empeoramiento de la calidad del empleo podía agravarse con la reforma laboral del Gobierno y, frente a ello, la organización sindical ha destacado los buenos resultados que obtuvo el acuerdo para la mejora del crecimiento y el empleo, que fue fruto del consenso social y que antes del estallido de la crisis, procuró un crecimiento de la contratación indefinida del 40 por ciento en el segundo semestre de 2006.