La Audiencia Provincial de Madrid juzgará el próximo jueves a un vendedor de la ONCE por apropiarse de un cupón premiado con 35.000 euros y decirle a su dueño que sólo le había tocado el reintegro por la última terminación.

En el escrito de actuación, el fiscal solicita cuatro años de cárcel por un delito de estafa para el empleado de la ONCE, así como para la persona a quien le entregó parte del dinero como anticipo para la realización de una obra. Además, se pide la inhabilitación para cualquier cargo en la ONCE.

Según el fiscal, el principal acusado había sido ya condenado por delitos de estafa en sentencias firmes. Sin embargo, el 18 de julio de 2008 recibió de la víctima un cupón de la ONCE que había adquirido en una panadería de Torrejón de Ardoz.

"A sabiendas de que el cupón estaba premiado con 35.00 euros, el acusado (aprovechando su credibilidad como empleado de la ONCE) hizo creer al Señor García que él sólo lo estaba con el reintegro por la última terminación, entregando a aquel un cupón, cuyo precio era de un euro y medio", recoge el fiscal.

El acusado hizo suyo el boleto premiado, entregándoselo con posterioridad a otra persona, que desconocía su procedencia, como anticipo para la realización de una obra.