Acelerones, pitidos o música a todo volumen. Son algunos de los ruidos que causa el tráfico y que hoy pasarán a la historia en el Carmen. La concejala de Contaminación Acústica, Lourdes Bernal, anunció ayer que esta noche empiezan los cortes de calles en los accesos al barrio, como avanzó 20 minutos.

Así, la Policía Local impedirá el paso de los vehículos de 22 a 8 horas en la plaza Doctor Collado y en las calles Bolsería con María Cristina, Serranos, Corona, Pintor Zariñena, Salvador Giner y Palomar.

Según explicó el edil de Seguridad, Miquel Domínguez, sólo podrán acceder al interior del perímetro los vecinos mostrando el DNI y los taxistas. Aunque los controles policiales estarán de jueves a sábado, la prohibición es efectiva todos los días de la semana.

Esta es una de las medidas cautelares acordadas entre vecinos y hosteleros cuyo objetivo es reducir los decibelios en el barrio hasta que se apruebe definitavamente la Zona Acústica Saturada (ZAS). Otras iniciativas que ya se vienen aplicando son la reducción de horarios de las tiendas de comida y la suspensión de la concesión de licencias para abrir nuevos locales.

Identificar el coche

Por otra parte, el concejal de Circulación, Alfonso Novo, informó ayer que la zona naranja de aparcamiento para residentes arrancará a principios de 2011. Una vez implantada, los vecinos que quieran optar a usarla deberán sacarse una acreditación que deberán poner en el coche (tipo pegatina de la ITV) que les acreditará usar las plazas a un precio reducido.

Multarán con radares a quien supere los 30km/h

El centro histórico vivió ayer su primer día como zona 30 con normalidad. Esta medida supone la reducción del límite de velocidad de 50 a 30 kilómetros por hora y da preferencia de circulación a los ciclistas.

En las calles más amplias afectadas por esta iniciativa como La Paz, San Vicente o Barón de Cárcer no se notó en exceso la diferencia, debido a que por la alta densidad de tráfico se hacía complicado superar el nuevo límite.

No obstante, el concejal de Seguridad Ciudadana, Miquel Domínguez, anunció que en un plazo aproximado de un mes, «la Policía Local hará controles aleatorios con radares móviles para vigilar que no se superan los 30 kilómetros por hora».