El grupo de investigación de Anatomía Patológica y Patología Molecular del Instituto de Formación e Investigación Marqués de Valdecilla (IFIMAV) trabaja, en colaboración con otro del País Vasco, en un proyecto, aún no finalizado, que detectaría el cáncer de mama simplemente con la obtención de plasma sanguíneo y la búsqueda posterior de diversos marcadores implicados en este tumor.

Con esta iniciativa, según ha destacado el Gobierno de Cantabria en un comunicado, el hospital cántabro "consolida" las técnicas biomoleculares para detectar el cáncer.

Este grupo de investigación ha cumplido una década desde que ha incorporado a la práctica diaria en Valdecilla "sofisticadas" técnicas biomoleculares de aplicación asistencial, por lo que recibe consultas de muchos hospitales de su entrono, al ser el único centro del norte de España que las tiene incorporadas.

Las técnicas asumidas por Valdecilla suponen un "exhaustivo" estudio genético biomolecular de los tumores malignos, lo que ha permitido que sean mejor caracterizados, y que al ser más seguro el diagnóstico se pueda aplicar al paciente un tratamiento más eficaz, de acuerdo con los marcadores moleculares hallados en el tumor del enfermo, ha explicado el Ejecutivo.

Asimismo, la línea de investigación en pacientes inmunosuprimidos con enfermedades infecciosas ha supuesto un "notable avance", según el Gobierno. Se trata de llegar a un diagnóstico en tejido de enfermedades infecciosas asociadas a trasplante, en el que se usan las técnicas de patología molecular PCR clásica y cuantitativa a tiempo real, para identificar agentes patógenos que comúnmente afectan a pacientes inmunodeprimidos sobre material de biopsia o citológico.

Para este colectivo, "es clave" la investigación traslacional, es decir, la básica aplicada al trabajo diario, a fin de poder mejorar los métodos de diagnóstico y de tratamiento, al tiempo que tratar de mejorar la calidad de vida de los pacientes que presentan un tumor.

Los trabajos de los profesionales de Valdecilla han sido "decisivos", según el Ejecutivo, en la detección de mutaciones en cáncer de colon; la detección de amplificación de un oncogén en cáncer de mama o la pérdida alélica de regiones en las neoplasias cerebrales. AVANCES

La investigación del colectivo ha servido para lograr "notables avances" en cáncer de colon, mama, pulmón y tumores cerebrales. Fruto del trabajo de este grupo "consolidado" del IFIMAV, que ya ha trasladado de manera continua los resultados de la investigación a la práctica diaria, al margen de haber conseguido también dos patentes, es su "cada vez mayor nivel de impacto" entre las mejores publicaciones científicas de carácter internacional.

Una de las patentes activa se aplica en el cáncer de riñón, difícil de tratar y que conviene detectar lo antes posible, y la otra en el cáncer neuroendocrino de pulmón, que no es frecuente, pero que es preciso detectar a tiempo. En los dos supuestos, la aportación del grupo sirve para mejorar los diagnósticos a tiempo.

Este grupo, con 11 miembros, ha sido valorado "muy positivamente" en la convocatoria de redes temáticas del Instituto Carlos III para la creación de Biobancos -dentro de la estructura del Biobanco de Cantabria-, formando el nodo de tejidos. En la actualidad cuenta con dos grandes líneas de investigación: cáncer y enfermedades infecciones en pacientes inmunosuprimidos, cada una a su vez con varios programas.

Se trata asimismo de un grupo ligado a la Red Temática de Centros de Investigación de Cáncer (RTICC); al Banco de Tumores del Marqués de Valdecilla, al margen de colaborar con múltiples grupos intrahospitalarios regionales, nacionales e internacionales, como el CIMA, CNIO o el NIH.

Según el Gobierno, los profesionales de Anatomía Patológica "se han volcado" en los tumores más frecuentes entre la población, y su alto nivel asistencial ha atraído a Valdecilla a formarse a profesionales de otros servicios regionales de salud. La colaboración del grupo con la Universidad de Cantabria "es patente", como demuestra la concesión de un equipo de microscopía confocal y microdisección por láser, que mejorará los diagnósticos de un buen número de tumores.

El responsable del grupo es José Fernando Val, catedrático y jefe de servicio, y está constituido, además, por José Javier Gómez, responsable de las técnicas biomoleculares; los anatomopatólogos Fidel Fernández, Javier Figols, Francisca Garijo, Carmen González y Marta Mallorga; los técnicos Emilia Fernández y Servando Lazúen, y las enfermeras Montserrat Nicolás y Montserrat Fernández.

El departamento de Anatomía Patológica realizó el año pasado 261 necropsias, 29.662 biopsias, 28.912 biopsias no intraoperatorias y 26.737 citologías.