El ex director de Greenpeace y fundador de la plataforma ecologista Equo, Juantxo López de Uralde, ha expresado este viernes su apoyo a la fusión de los partidos Els Verds y Iniciativa d'Esquerres, de cuya unión saldrá este fin de semana una nueva formación de izquierdas y ecologista.

En una rueda de prensa en la que ha estado acompañado por el portavoz de Els Verds, Miquel Àngel Llauger, y el coordinador de Iniciativa d'Esquerres, David Abril, López de Uralde ha expresado su deseo de que los valores y principios que representa Equo, como son la apuesta por la equidad y la sostenibilidad, tomen forma desde mañana en Baleares en la Asamblea constituyente que Els Verds y Iniciativa celebrarán en el Auditorio Francesc Quetgles, en Palma.

El creador de Equo ha recordado que la plataforma que lidera la componen ecologistas, sindicalistas y gente que proviene de ONG y ha explicado que el proyecto tiene dos pilares: un think-tank del ecologismo político y de pensamiento alternativo, y por otro lado, la articulación de una red política con el objetivo de presentarse a las elecciones de 2012.

Llauger y Abril han destacado las buenas expectativas de participación a la asamblea constituyente de mañana, donde se decidirá el nombre del nuevo partido, de manera directa por las personas adscritas a ambas formaciones, así como con la gente que se ha acercado recientemente atraída por el proceso de confluencia.

Una confluencia que, han recordado, quiere representar políticamente el nuevo movimiento "verde y alternativo" significado por Equo, los partidos verdes clásicos alrededor de la Coordinadora Verda, y el ecosocialismo defendido por Iniciativa per Catalunya-Verds.

La asamblea que se inicia esta tarde en el Laboratorio Francesc Quetgles abordará tres ejes de trabajo político del nuevo partido: el planteamiento de alternativas en clave de equidad y sostenibilidad a la crisis capitalista; la articulación de un tercer espacio político, necesario para garantizar gobiernos de progreso y consolidar los cambios necesarios; y la apuesta por un nuevo modelo de partido, que huya de estructuras, y que funcione en clave de red, de conexión de personas y colectivos que no se resignan y que quieren cambiar las cosas.