La Junta y la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM) han firmado este viernes un convenio de colaboración para impulsar la adhesión de las 65.000 empresas que forman parte de la entidad al sistema de hojas electrónicas de quejas y reclamaciones, por una duración de dos años, que se prorrogará de forma automática, por iguales periodos de tiempo.

De esta forma, Málaga se convierte en la primera provincia de Andalucía en formalizar el compromiso de los empresarios para "difundir, fomentar y facilitar la adhesión de sus asociados a este sistema", cuyo principal objetivo es "ofrecer a los consumidores la posibilidad de presentar una queja o reclamación desde Internet".

Actualmente, se han adherido en Málaga un total de 40 empresas pertenecientes al sector inmobiliario, de las telecomunicaciones, del motor, del comercio minorista, de las agencias de viajes o de los servicios básicos, como luz y agua, entre otros.

Este convenio forma parte de la campaña informativa puesta en marcha por la Consejería de Salud en 2009 para dar a conocer este sistema e impulsar su utilización en el tejido empresarial andaluz, según han informado desde la Junta en un comunicado.

Con este objetivo se han repartido 125.000 folletos entre diferentes asociaciones de empresarios, de consumidores, los servicios provinciales de consumo de la Junta y las juntas arbitrales en esta materia. VENTAJAS

El sistema de hojas electrónicas facilita instantáneamente el correspondiente acuse de recibo, que consiste en una hoja electrónica de quejas y reclamaciones en la que se especifica la fecha y hora de presentación. Asimismo, tendrá valor probatorio de la presentación y del contenido de la documentación presentada.

Una vez presentada la queja, el sistema remite un correo electrónico a la empresa, para que acceda a su contenido, así como a la persona reclamante, para indicarle el momento en que esta lo hace.

Asimismo, esta oficina virtual permite al usuario remitir toda la documentación sobre su queja a la administración, en el caso de que no haya obtenido respuesta por parte de la entidad reclamada en el plazo de diez días hábiles o, bien, que la respuesta ofrecida por la empresa no haya sido satisfactoria para el consumidor.

De esta forma, la ciudadanía tiene la opción de dar a conocer a las autoridades de consumo los hechos relativos a sus quejas, sin necesidad de desplazarse a ningún registro físico, permitiendo una mayor comodidad y agilidad en la tramitación de sus reclamaciones.