Los presidentes de las Regiones Ultraperiféricas (RUP) han suscrito este miércoles una declaración por la que solicitan a la Comisión Europea "rapidez" para que atienda sus reivindicaciones para el periodo 2014-2020 y en la que se incluye la adaptación legislativa y financiera a la realidad, al tiempo que han pedido el "mantenimiento o incremento" de los fondos de cohesión, según ha explicado el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero.

El jefe del Ejecutivo canario ha detallado en rueda de prensa tras la suscripción y en el marco de la XVI Conferencia de presidentes de las RUP de la UE que se desarrolla en Santa Cruz de Tenerife que "las regiones ultraperiféricas no son un jardín, ni generan desventajas, sino que tienen enormes potencialidades". "Lo más difícil de estos dos años ha sido generar conciencia del valor y potencial de las RUP tanto geográfico como para la seguridad, el tráfico de personas o como plataforma de cooperación con las áreas limítrofes", ha añadido.

De igual forma, los presidentes de Azores, Guayana, Martinica, La Reunión, Madeira, Guadalupe y Canarias han reclamado que se potencien las políticas de gran vecindad —que mejoren el enclave geográfico donde estamos situados—, se protejan las producciones tradicionales y los incentivos fiscales que compensan desventajas se conviertan en "permanentes". En este punto, Rivero ha defendido que el hecho de que "la mayoría" de los incentivos fiscales sean "revisados" provoca "incertidumbre" y retrasa las inversiones.

Rivero ha indicado que la pretensión de las RUP es que "cuanto antes" la Comisión emita una nueva comunicación en la que se fijen los criterios a seguir en el periodo 2014-2020. Así y sobre la adaptación de las políticas legislativas y financieras subrayó que "es evidente que la situación de dificultad es mayor en estos territorios". Por ello abogó porque se "complementen" las medidas legislativas con nuevas normas que compensen la "lejanía".

Asimismo, ha ahondado el jefe del Ejecutivo regional que es preciso "un mayor esfuerzo" económico para atender las necesidades de las RUP. Así puso como ejemplo que el costo de la ultraperiferia le cuesta a las empresas de Canarias 6.000 millones de euros, y el archipiélago sólo recibe 200 millones. Ello dificulta la competitividad, apostilló.

El presidente de Azores, Carlos César, ha coincidido en su solicitud de "rapidez" en el reconocimiento de la realidad de las RUP. "Los poderes centrales se olvidan de las RUP y tenemos que llamar la atención para evitar los graves daños", dijo al tiempo de calificar como "fundamental" que se dé continuidad a las estas políticas tras 2013.

Carlos César además destacó que lo más complicado es en la creación de una conciencia sobre el valor de las políticas regionales a favor de la inversión financiera. "Es difícil mantener el reconocimiento", ha expuesto para insistir en que hay que "permanecer atentos y vigilantes" para que permanezcan estos criterios.

Por último se centró el presidente de Azores en que existen dos frentes de batalla. Por un lado habló de defender la política regional "en general" y por otro proteger el espíritu del Tratado de Lisboa.

Arbitrios permanentes

El presidente de Martinica, Serge Letchimy, defendió la relevancia de que exista un "estatuto específico" que marque las líneas de trabajo. Así reclamó que se "perennicen" los arbitrios, se proteja la producción local y se ayude a salvar los sobrecostes de la ultraperiferia. Así recordó que Martinica tiene un 23 por ciento de desempleo, mientras en Francia alcanza el 8 por ciento. "Hay que reducir el desempleo y aumentar el PIB", ha planteado.

En esta línea, el presidente de La Reunión, Didier Robert, ha explicado que los desafíos son "recuperar el retraso en infraestructuras, ya que existe una brecha entre las RUP y el territorio continental; mantener el régimen de exenciones, que sirve de palanca de acompañamiento a las empresas; y la integración con el entorno geográfico". "Debemos convencer a Europa de la suerte que tiene de tenernos", ha zanjado.

Autosuficiencia energética

El presidente de Guadalupe, André Atallah, coincidió en que "hay que luchar", ya que el actual es un momento crucial. Así destacó la apuesta por mejorar la accesibilidad con la revisión de las políticas de transportes; y lograr la autosuficiencia en política energética con las renovables y en la agricultura. André Atalla también recalcó la relevancia de la educación y el empleo. "Solos vamos rápido, pero juntos vamos más lejos", ha concluido.

El vicepresidente de Madeira, Joao Carlos Cunha e Silva, ha afirmado que las RUP deben tener "una sola voz". "Hay que hablar alto para que nuestra voz llegue a Bruselas", ha continuado para concluir que la ultraperiferia debe de dejar de ser un artículo para tener "un contenido y continuar la batalla".

Por su parte, el presidente de Guayana, Rodolphe Alexandre, puso el énfasis en que las RUP no sólo exigen a la UE, sino que también "aportan". Así reclamó que se valoren las potencialidades de estas regiones. TRASPASO

Con la celebración de esta conferencia que concluye este jueves, Canarias finaliza su mandato de dos años al frente de las RUP y toma el relevo la región de Martinica. El presidente de Martinica ha señalado que asume la Presidencia con la "obligación" de estar al mismo nivel que lo ha estado Canarias. Serge Letchimy ha adelantado que hay que proponer "alternativas inteligentes y coherentes" de desarrollo. "Hay que sensibilizar a todos los estados miembros de la UE", ha finalizado.