Todos los vehículos destinados al transporte escolar y de menores que fueron inspeccionados en los últimos días por la Policía Local de Salamanca cumplían los requisitos de seguridad y control previstos por la legislación vigente en la materia.

Así se desprende de la campaña especial que la Policía Local de Salamanca llevó a cabo en todo el término municipal, durante la semana pasada, en la que no se detectó una sola infracción a la normativa sobre el transporte escolar y de menores.

Estas inspecciones de control se realizaron en los catorce colegios o institutos que son estaciones de destino del transporte escolar tanto urbano como interurbano, efectuándose un total de 24 operaciones de control y supervisión de vehículos de transporte de menores.

La campaña se efectuó en colaboración con la Dirección General de Tráfico y en cumplimiento del Plan Nacional de Seguridad Vial, "sin perjuicio de la vigilancia normal que se realiza durante todo el año", apuntaron fuentes municipales.

El objetivo de esta iniciativa consistió en comprobar que los vehículos dedicados al transporte escolar cumplían con los requisitos sobre condiciones de seguridad en el transporte escolar y de menores que se recogen en el Real Decreto 443/2001.

En estas inspecciones de control se supervisaron, por un lado, las autorizaciones genérica y especial de cada vehículo, la ITV, el seguro obligatorio y el de responsabilidad civil, el permiso de conducción y la autorización especial de cada conductor, así como su estado físico y la posible presencia del alcohol en la conducción.

También se hizo "especial hincapié", apuntaron desde el Ayuntamiento, en la obligatoriedad de que los menores vayan acompañados en cada autobús por una persona adulta debidamente cualificada.

Asimismo, se inspeccionaron los dispositivos de funcionamiento de las puertas de servicio y emergencia, la utilización de los sistemas de retención y de los cinturones de seguridad, los dispositivos luminosos y la señalización específica de transporte escolar, la posible manipulación del tacógrafo, el exceso de tiempo de conducción o la minoración de los descansos.