La Organización Mundial de la Salud (OMS) cifra en un billón el número de mujeres que en 2030 tendrán más de 50 años y que vivirán varias décadas con la menopausia.
Este lunes, 18 de octubre, se celebra el Día Mundial de la Menopausia con la intención de mejorar la calidad de vida de los millones de mujeres que sufren la incomodidad de los cambios hormonales en esta nueva etapa de su vida.
¿Qué es la menopausia?
La Asociación Española para la Menopausia la define como “un momento de la vida de la mujer caracterizado por el cese de la menstruación, y que inicia una etapa de la vida que se conoce como climaterio. Esta etapa representa la transición entre el período fértil y la vejez. A pesar de no ser una enfermedad, provoca, en la mayoría de las mujeres, síntomas molestos que alteran la dinámica social y laboral”.
La edad media en las que se sufre esta transición es de 51,4 años y se produce porque la mujer comienza a perder progresivamente su función ovárica y por tanto baja la producción de las hormonas femeninas, los estrógenos y progesterona.
Signos y síntomas
- Sofocos. Es el principal síntoma asociado a la menopausia. Se produce a causa del estrés emocional, comidas copiosas, consumo de alcohol y cambios bruscos de la temperatura. En el 20% de las mujeres persiste por más de 5 años.
- Ciclos irregulares. Es propio de la etapa pre menopáusica cuando de manera progesiva se pierde el ciclo menstrual.
- Aumento de grasa. La menopausia se asocia a los cambios metabólicos por lo que el aumento de peso o redistribución de las grasas, es una característica habitual en esta etapa.
- Osteoporosis. Sufrir la menopausia precozmente (antes de los 40 años) es uno de los factores de riesgo de la osteoporosis. La pérdida de masa ósea se debe, además de por el paso del tiempo, a la desprotección de las hormonas femeninas sobre ellos.
- Alteración del ánimo. Durante la menopausia, a causa del descenso de los estrógenos, son frecuentes las alteraciones del estado de ánimo que se manifiesta por, disminución de la energía, cansancio, abatimiento, falta de concentración, ansiedad, irritabilidad y agresividad.
- Cambios en la vida sexual. La falta de estrógenos hace que la mujer sufra sequedad vaginal y pérdida de la líbido, síntomas fácilmente tratables.
- Cuidado cardiovascular. El estado del aparato cardiovascular es uno de los aspectos más importantes de la salud de la mujer y de su esperanza de vida en el período posmenopáusico. Los estrógenos actúan como protectores de posibles enfermedades cardiovasculares, actuando sobre el mantenimiento del flujo vascular, desarrollando una acción vasodilatadora y controlando los niveles, por ejemplo del colesterol total o los triglicéridos.
Tratamiento
En principio cualquier mujer en edad menopáusica es candidata a recibir THS (Tratamiento Hormonal Sustitutivo) siempre y cuando sus beneficios superen sus posibles riesgos.
El tratamiento, según el doctor Santiago Palacios, director del Instituto de la Mujer y experto en ginecología, en un artículo publicado recientemente sobre el tratamiento hormonal, afirma “es importante que la paciente sea informada de las ventajas y riesgos del tratamiento en general, y de los beneficios que obtendría ella en su caso particular para que finalmente, paciente y médico, tomen la decisión”.
El Tratamiento Hormonal Sustitutivo está indicado para:
- Menopausia precoz, ya sea espontánea o quirúrgica
- Mujeres con síntomas floridos de menopausia, es decir, insomnio grave o sofocos constantes.
- Mujeres con osteoporosis demostrada o con riesgo de presentarla.
- Mujeres con enfermedad cardiovascular o riesgo de padecerla
Consejos
La menopausia es una parte esperada y natural del desarrollo de una mujer y no necesita prevenirse. Sin embargo, hay formas para reducir o eliminar algunos de los síntomas que la acompañan. El Ministerio de Sanidad da varios consejos para que la transición menopáusica afecte a las mujeres lo menos posible:
- Control de la presión arterial, colesterol y otros factores de riesgo para la cardiopatía.
- Alimentación equilibrada.
- Ejercicio regular para fortalecer los huesos.
- Actitud positiva. Uno de los factores más perjudiciales es el mental. La mujer, ante la pérdida de la menstruación, cambios hormonales y síntomas derivados de éstos, tiende a padecer un estado de ánimo bajo ante los cambios. Una actitud positiva, optimista y de aceptación es esencial para afrontar esta nueva etapa de la vida de la mujer con total plenitud.
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