La ciudad de Fuengirola (Málaga) ha viajado este fin de semana 200 años en el tiempo para recordar los hechos sucedidos en 1810 cuando la provincia se encontraba bajo la ocupación napoleónica y el bando aliado británico-español preparó una acometida para liberar Málaga, seleccionando como punto estratégico el Castillo Sohail de la localidad.

El asalto duró todo un fin de semana. Así, la recreación de la batalla, en la que han participado unas 170 personas, se ha dividido en una primera parte, que tuvo lugar este sábado por la tarde donde se produjeron las primeras escaramuzas; y una segunda, esta mañana, cuando se ha producido el desenlace del ataque, según han explicado desde el Ayuntamiento.

La batalla de Fuengirola se enmarcó en la Guerra de la Independencia que enfrentó a las tropas comandadas por el general británico Lord Blayney, con 2.000 hombres bajo su mando, contra el medio millar de soldados polacos del Ducado de Varsovia, que formaban parte del ejército imperial.

El destacamento polaco defendió con uñas y dientes su privilegiada posición, hasta el punto de desconcertar a las tropas de Blayney e incluso conseguir arrebatarle algunos cañones apostados en la falda de la montaña para repeler el ataque, que terminó con el apresamiento del general inglés.

El Ayuntamiento ha organizado estos actos en colaboración con las asociaciones Teodoro Reding de Málaga, y el Cuarto Regimiento de Infantería polaco del Gran Ducado de Varsovia ha vuelto a llenar el ambiente del ahora parque del Castillo de parapetos, olor a pólvora y del estruendo de los cañones con el fin de acercar a los ciudadanos un suceso importante de la historia.

La alcaldesa, Esperanza Oña, ha agradecido a todas las personas que han participado "su esfuerzo personal para recordar un suceso que nunca debemos repetir, como es una batalla entre naciones" y ha recordado que "el propio Napoléon reconoció que nunca debió invadir España y que su derrota se debió al frío ruso y al calor de los españoles".