Según los datos del Valedor do Pobo, José Ramón Vázquez Sandes, sobre la situación de la etnia gitana en Galicia, el acceso a la vivienda sigue siendo uno de los problemas más acentuados para el colectivo. Pese a que se lograron reducir las cifras, en la actualidad todavía un tercio tiene dificultades para el acceso a la vivienda normalizada. En los años noventa era el 49,2%.

Aunque no se puede hablar de racismo en Galicia, dijo Vázquez Sandes, sí se viven situaciones de «importante discriminación infundada» que se materializan, además de en la vivienda, en ámbitos como los de la educación, la asistencia sanitaria y la participación en la vida pública.

Absentismo escolar

La tasa de escolarización total de niños gitanos se sitúa en el 71%; en educación infantil, el 63%, y en secundaria, un 40%. El absentismo escolar y el bajo rendimiento condicionan la escasa presencia gitana en la educación superior. En el conjunto de España existen aproximadamente unos 200 universitarios de raza gitana; en Galicia, los datos se convierten en anecdóticos.

La contratación normalizada de personas gitanas sigue siendo un importante reto de futuro. Casi dos de cada tres gitanos, un 62,7%, se dedican en la actualidad a la venta ambulante. La recogida de chatarra es una ocupación en declive, pero aún su segundo sector de actividad, con un 24,3%. El resto, trabajos por cuenta ajena (8,3%) y puestos en trabajos tradicionales (0.8%).