La izquierda abertzale de Gipuzkoa ha pedido al PNV que "actúe con responsabilidad, haga sus deberes dentro de casa y ponga todos los intrumentos políticos que gestionan al servicio de la soberanía de Euskal Herria".

Además, ha considerado que, aunque la iniciativa jeltzale 'Batu Gaitezen' tiene "elementos interesantes", no puede limitarse a Gipuzkoa a no ser que sea "una mera dinámica electoral", y ha denunciado "una política de no definición calculada" del PNV, "con dos discursos y una única línea".

En una rueda de prensa en San Sebastián, los representantes de la izquierda abertzale de Gipuzkoa Idoia Aiastui y Peio Gascon, acompañados de la alcaldesa de Hernani, Marian Beitialarrangoitia, y el que fuera primer edil de Azpeitia por ANV, Iñaki Errazkin, han leído un comunicado, en euskara y castellano, respectivamente, en el que anuncian que "la dinámica de interlocución" que anunciaron recientemente "ya ha dado sus primeros pasos" para "compartir los contenidos" de su "reflexión estratégica".

En este sentido, han subrayado "la ilusión y las ganas para el cambio político" que, según han asegurado, les han llegado desde diferentes ámbitos de la sociedad guipuzcoana. A su juicio, esta dinámica de interlocución es el primer paso en la dirección de conseguir el cambio político para el territorio histórico, que requiere de "la articulación de una mayoría social y política en torno al proyecto independentista y progresista", mayoría que han opinado "ya existe hoy en día". "Éste es un primer ejercicio para aunar fuerzas", han añadido.

Además, se han referido a la propuesta 'Batu gaitezen' del GBB del PNV, que pretende unir fuerzas abertzales, y que han enmarcado en el "cambio radical que se ha dado en las últimas semanas en las coordenadas políticas del debate en Gipuzkoa", que han hecho que se "derrumbe la ficción creada a partir de la exclusión de la izquierda abertzale, segunda fuerza en las últimas elecciones a las juntas generales con 72.000 votos".

"El PNV se ha visto obligado a modificar y maquillar su línea política en Gipuzkoa", han aseverado, para afirmar que, en los últimos años, han intentado "vender una imagen trampeada de una Gipuzkoa de ficción".

La izquierda abertzale ha lamentado que los jeltzales quieren "desarrollar el debate en términos exclusivamente electoralistas", mientras este colectivo busca "un debate estratégico" proyectado "más allá de la cita electoral", tarea en la que ha anunciado "se pondrá manos a la obra con el norte puesto en el reconocimiento nacional de Euskal Herria".

Tras considerar que 'Batu Gaitezen' tiene "elementos interesantes, ya que se basa en el derecho a decidir y el reconocimiento de todos los derechos", han criticado que el presidente del EBB del PNV, Iñigo Urkullu, les haya remitido al GBB para tratar sobre esta propuesta.

"No entendemos que la dinámica de Batu Gaitezen se limite sólo a Gipuzkoa. No entendemos cómo quiere el PNV defender los derechos de los ciudadanos de Euskal Herria sólo desde Gipuzkoa, a no ser que la dinámica de Batu Gaitezen se trate de una mera dinámica electoral", han afimado. "CONTRADICCIONES"

De este modo, han considerado que los jeltzales "están mezclando la pluralidad interna imprescindible en un partido político con las contradicciones que tiene en este momento". "En nombre de la pluralidad, quiere llevar a cabo una política de no definición calculada con dos discursos y una única línea", ha señalado.

Frente a ello, han instado al PNV a "definirse a nivel estratégico y programar hacia dónde quiere dirigirse, a la Moncloa o a Euskal Herria", porque "no puede jugar con las ilusiones renovadas de los abertzales, ni hacer frente de una forma tan irresponsable al nuevo escenario abierto en Euskal Herria".

Asimismo, la izquierda abertzale de Gipuzkoa ha aseverado que hace una "clara apuesta por abrir espacios de trabajo común entre abertzales" que se basen en las "políticas a desarrollar" en el territorio histórico, abriendo los mismos al PNV siempre que "realice un cambio profundo en las políticas desarrolladas en los últimos años" y que supere sus "políticas regresivas".